Embarazo
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Embarazo. Se denomina embarazo al período que transcurre entre la implantación en el útero del óvulo fecundado y el momento del parto. Comprende todos los procesos fisiológicos de crecimiento y desarrollo del feto en el interior del útero materno, así como los significativos cambios fisiológicos, metabólicos e incluso morfológicos que se producen en la mujer encaminados a proteger, nutrir y permitir el desarrollo del feto, como la interrupción de los ciclos menstruales, o el aumento del tamaño de las mamas para preparar la lactancia.
En la especie humana las gestaciones suelen ser únicas, aunque pueden producirse embarazos múltiples. La aplicación de técnicas de reproducción asistida está haciendo aumentar la incidencia de embarazos múltiples en los países desarrollados.
El embarazo humano dura unas 40 semanas desde el primer día de la última menstruación o 38 desde la fecundación (aproximadamente unos 9 meses). El primer trimestre es el momento de mayor riesgo de aborto espontáneo; el inicio del tercer trimestre se considera el punto de viabilidad del feto (aquel a partir del cual puede sobrevivir extraútero sin soporte médico).
Sumario
- 1 Fases del embarazo
- 2 Ciclo del embarazo
- 2.1 Primer mes: Los primeros latidos
- 2.2 Segundo mes: Su tamaño se triplica
- 2.3 Tercer mes: Su presencia es evidente
- 2.4 Cuarto mes: Oye la voz de la madre
- 2.5 Quinto mes: El sexo se define
- 2.6 Sexto mes: Abre sus ojos y duerme
- 2.7 Séptimo mes: Preparando sus órganos
- 2.8 Octavo mes: En la etapa final
- 2.9 Último mes: La hora de nacer
- 3 Precauciones
- 4 Observaciones
- 5 Signos presuntivos del embarazo
- 6 Signos de certeza de un embarazo
- 7 Alimentación en el embarazo
- 8 Hinchazón
- 9 Ácido fólico en cápsulas y alimentos
- 10 Prevención de estrías
- 11 Embarazo sano
- 12 Consecuencias que produce el alcohol en el embarazo
- 13 Véase también
- 14 Fuentes
- 15 Referencias
Fases del embarazo
Detección del embarazo
El primer síntoma por el que una mujer suele sospechar que está embarazada es la ausencia de la menstruación. La confirmación se obtiene a través de la realización de análisis de sangre y de orina. En los análisis se detecta la presencia de una determinada hormona producida por la placenta, la HCG (Hormona Gonadotropina Coriónica). Estos test no deben realizarse antes de los 10 días siguientes a la fecundación, pues el resultado siempre será negativo. Si el test realizado en casa es positivo conviene acudir al médico que confirmará el resultado mediante un análisis de sangre. Desde la primera consulta el ginecólogo indicará una fecha probable de parto a partir de la fecha del primer día la última menstruación y los datos sobre el tamaño del feto obtenido a partir de la ecografía.
Primer trimestre
Se extiende hasta la semana 12. Éste es el más problemático, en el que muchas mujeres sufren más molestias y aquel en que se corren más riesgos de aborto. Los cambios físicos en las mujeres durante estos tres meses iniciales no son los más visibles, aunque se produce un aumento del pecho y al final de los mismos el abdomen ya aparece más o menos abultado. Durante este tiempo las futuras madres experimentan molestias como náuseas, mareos, problemas estomacales, mayor frecuencia en la micción, y presencia de sueño de forma muy habitual.
Es muy frecuente que debido a la alteración hormonal el carácter se vuelva mucho más sensible y surjan apetencias concretas, que popularmente reciben el nombre de antojos. En muchos casos las mujeres generan ascos a ciertos olores o sabores. Muchos de estos cambios y molestias desaparecerán al final de este trimestre. El feto en estos tres meses aumenta su tamaño de forma considerable y empiezan a ser observables algunas partes de su cuerpo, además de la cabeza, como las extremidades. Su corazón late y el resto de sus aparatos ya están formándose.
Alimentación de la embarazada
La mujer embarazada ha de adquirir una serie de hábitos saludables en su alimentación durante el embarazo. Si antes te saltabas comidas, picabas en exceso entre horas, abusabas de la comida rápida, tomabas pocos lácteos o las frutas nunca estaban presentes en tu dieta, elimina todas estas costumbres y adopta estos sencillos pero valiosos consejos durante la gestación: debes tomar suplementos vitamínicos, mantener una dieta sana y equilibrada, Evitar las grasas y beber muchos líquidos.
Segundo trimestre
Se extiende desde la semana 13 a la 26. Durante estos meses las mujeres cambian notablemente su aspecto aumentando considerablemente de peso. Los mareos y náuseas desaparecen, pero suelen incrementarse más la micción y las molestias estomacales como la acidez gástrica.
A partir del cuarto mes es posible detectar el sexo del bebé que ya tiene apariencia humana. El porcentaje de acierto es superior en el caso de los varones. El feto se cubre en este tiempo de una especie de pelusa que recibe el nombre de lanugo. Su desarrollo es vertiginoso, ya tiene claramente formadas todas las partes de su cuerpo y comienza a realizar movimientos. Su sistema inmunitario empieza a desarrollarse. Se alimenta a través de la placenta. En el sexto mes puede medir ya alrededor de 25 centímetros y tener uñas, pelo y poder a abrir los ojos.
Se cree que durante este trimestre el feto comienza a adquirir la capacidad de escuchar los ruidos que se producen en el interior de su madre y posteriormente los provenientes del exterior.
Tercer trimestre del embarazo
Se extiende desde la semana 27 hasta el final. Durante el tercer trimestre la mujer alcanza su peso máximo, presenta frecuentemente hinchazón de piernas, dolor de espalda y el consecuente cansancio. La presión del bebé se hace más intensa sobre el resto de órganos por lo que las molestias estomacales aumentan, así como la frecuencia de la micción. Se experimenta también la sensación de falta de aire.
Comienzan a sentirse las contracciones de Braxton Hicks. No son dolorosas, pues solo se manifiestan con tensión y endurecimiento del abdomen. Son movimientos del útero preparatorios para el parto. El feto sigue creciendo, la grasa se desarrolla debajo de su piel. Los pulmones se van terminando de formar y poco a poco aumenta su capacidad para respirar.
Durante este tiempo pasará del kilogramo a los tres o más de tres kilogramos que pesará al nacer. Su lanugo se caerá y se colará en posición invertida dispuesto a venir al mundo.
Ciclo del embarazo
Primer mes: Los primeros latidos
Una vez instalado en el útero materno el embrión comienza su desarrollo. Aunque en un comienzo es sólo un grupo de células, durante la segunda semana de gestación aparece una marca oscura en la parte posterior del embrión, marcando la posición de la médula espinal. A partir de la segunda, cualquier test nos informará de la presencia del bebé. En la tercera semana comienzan a formarse todos los órganos como los pulmones, y hacia el final de esta semana el corazón comienza a latir.
Aparece la Hormona Gonadotropina Coriónica Humana –que también se conoce como Hormona del embarazo- y los niveles de progesterona aumentan.
El bebé ya tiene cabeza y tronco. El tubo neuronal, a lo largo de la espina, está cerrado y formará el cerebro. Se esbozan unas pequeñas yemas que serán los brazos y piernas. Así también las células que conformarán el hígado comienzan a producir la sangre del embrión. Entrando a la cuarta semana de gestación ya tiene 4 milímetros de largo y pesa 1 gramo. Aún cuando la madre no sospeche acerca de su nuevo estado, su cuerpo comienza a cambiar. El útero inicia su expansión, cesa el ciclo ovulatorio y los ovarios generan mayor cantidad de progesterona. Es frecuente en las mujeres el aumento de volumen de los pechos y el oscurecimiento de la aureola, acompañada de una mayor sensibilidad en los pezones. Asimismo, los cambios en el útero aumentan la necesidad de orinar, junto a una sensación de nauseas, fatiga y sueño suelen ser habitual en los primeros meses del embarazo, acompañada de una sensación de vacío de estomago y acidez, también síntomas muy frecuentes.
Segundo mes: Su tamaño se triplica
Esta etapa se caracteriza por un desarrollo extremadamente veloz, ya que el feto triplica su tamaño. Los rasgos comienzan sutilmente a dibujarse, los dedos de los pies y las manitos, los tobillos, las muñecas y las orejas.
El corazón late a 170 pulsaciones por minuto, unas dos veces más rápido que el de un adulto. Su cabeza todavía es muy grande en comparación con el cuerpo, y está inclinada hacia delante sobre el pecho. El cuerpo comienza a estirarse y alongarse. Todos los sistemas y los órganos principales forman su estructura básica. El embrión puede responder al tacto, aunque aún la madre no puede percibir sus movimientos. Hacia fines de este mes mide entre 2,2 y 3,3 centímetros y pesa aproximadamente 4 gramos. El cerebro crece, se empiezan a formar brazos y piernas, tiene ojos, pero aún no párpados. La boca, el intestino y estómago se desarrollan rápidamente, pero aún no están en funcionamiento. En la madre se nota un ensanchamiento de la cintura. Es probable que continúen las náuseas, mareos, fatiga y cansancio. Aparece el aspecto resplandeciente porque nuestro volumen de sangre crece un 20 por ciento (nuestro cabello está fuerte y brillante). En la octava semana podremos escuchar los latidos de nuestro bebé.
Tercer mes: Su presencia es evidente
Al comenzar el tercer mes el embrión pasa a llamarse feto. Empiezan a formarse los párpados, las cejas, el hígado, se delinea la boca e incluso las uñas crecen en sus pequeños dedos. También comienza a desarrollarse la mayoría de las articulaciones, aparecen los primeros cartílagos y costillas. La sangre circula entre el feto y el útero y comienza a funcionar la placenta.
Su corazón funciona de manera completamente autónoma. Realiza sus primeros reflejos de succión, a veces puede tener hipo y frecuentemente traga líquido amniótico. Aparecen los riñones del pequeño y empieza a evacuar orina en el líquido amniótico. Así también, la glándula tiroidea está formada y secreta hormonas. Sus órganos genitales empiezan a crecer y al finalizar este primer trimestre es posible en algunos casos identificar su sexo. Mide aproximadamente 13 centímetros y pesa alrededor de 14 a 20 gramos. Al final de este mes, el bebé está completamente formado y la piel se recubre de un fino vello llamado lanugo, que la protege. La madre puede subir uno o dos kilos de peso y el útero crecerá hasta sobrepasar el límite de la pelvis. Los mareos pueden seguir, pero si sentíamos náuseas, ya empiezan a disminuir. Los mareos pueden seguir, pero si sentíamos náuseas, ya empiezan a disminuir. Nuestra presión arterial disminuye y eso puede provocarnos aún más cansancio.
Cuarto mes: Oye la voz de la madre
En el cuarto mes el feto ha aumentado de peso considerablemente. La placenta está completamente formada. El rostro del bebé ya puede observarse en detalle: su boca, ojos, nariz y orejas están completamente formados. Su piel es muy fina, transparente. Su aparato digestivo empieza a funcionar y los
dedos de manos y pies aparecen completamente formados. Aparecen las uñas e incluso es posible identificar sus huellas dactilares. También es posible en la mayoría de los casos conocer el sexo del bebé, aunque es necesario que esté en una postura adecuada. El cabello empieza a crecer y la glándula tiroides, que se había empezado a formar en el segundo mes de embarazo, comienza a funcionar y a producir la hormona tiroidea, que asegura en estos momentos el crecimiento del bebé. Puede hacer sus primeras expresiones como fruncir la frente, hacer muecas y ponerse bizco. Las retinas son sensibles a la luz que traspasa el abdomen de su madre.
Los huesos pequeños del oído medio vibran y algunos primeros sonidos son audibles hacia el final de la semana 16 de gestación. Los pulmones continúan su desarrollo y el feto respira líquido amniótico, recibiendo el oxígeno a través de la placenta. El desarrollo celular de su cerebro es impresionante, cada minuto produce cerca de 100.000 neuronas. Al concluir este mes alcanzará cerca de 20 centímetros de largo y pesará unos 100 gramos. En la mayor parte de las embarazadas desaparecen las náuseas y los vómitos. Persiste el estreñimiento, la tendencia a la acidez de estomago y flatulencia. Pueden aparecer venas varicosas y hemorroides, así como hinchazón de los tobillos.
Quinto mes: El sexo se define
El feto ya mide cerca de 28 centímetros y pesa aproximadamente 300 gramos. El cerebro y la médula espinal completan en esta etapa de gestación su desarrollo. Dependiendo del sexo del feto se genera el útero o la próstata. A partir de la semana 20, se forman las cuerdas vocales y la piel se cubre de una sustancia blanca y espesa llamada vérnix caseosa, que le sirve de protección dentro de su ambiente líquido. La mayoría de los dientes ya tienen lugar en las mandíbulas y ya está dotado de unos diminutos pero completísimos tímpanos que le permiten oír el latido de su corazón y el ruido de su propio cuerpo al golpearse contra la pared uterina. Deja, por tanto, de vivir en silencio. También puede escuchar los sonidos externos al útero y responder con movimientos a ritmos y melodías, y la madre puede sentir como se mueve ya que se ha vuelto muy activo. Durante este mes las células nerviosas han completado su dotación al cerebro. El nuevo ser nunca tendrá tantas neuronas como ahora. Su corazón presenta una frecuencia de 140 a 150 latidos por minuto en promedio. En la madre el vientre se redondea, persiste el estreñimiento, hinchazón de pies y tobillos.
Sexto mes: Abre sus ojos y duerme
En este mes se calcula que puede producir unos cincuenta movimientos por hora. Sus pataditas se pueden sentir en la parte superior del vientre, en la inferior y en los laterales. Su piel ya no es transparente, pero sí muy delgada y rojiza porque la cantidad de grasa es todavía insuficiente. Mide 35 centímetros y pesa alrededor de 800 gramos. Sus rasgos faciales ya están definidos y durante la semana 22 abre sus ojos y tiene ciclos de sueño y vigilia. Es en esta etapa cuando las células cerebrales, que controlan el pensamiento consciente, tienen una importante maduración. Ya empieza a definirse la forma final que tendrá la columna vertebral, con sus 33 anillos, 150 articulaciones y 1.000 ligamentos. Se desarrollan su sentido de gusto y olfato y sus párpados se despegan, permitiéndole abrir los ojos. Todos sus órganos están muy desarrollados, aunque el cerebro y los pulmones aún no completamente. Para poner a punto todos los huesos, músculos y posibilidades de movimiento, el bebé práctica diariamente una larga y elaborada tabla de ejercicios que, además de puñetazos y patadas, también incluye movimientos respiratorios. Durante esta etapa la madre manifiesta dolor de espalda, que puede mejorar con ejercicios adecuados.
Séptimo mes: Preparando sus órganos
Ya mide 39 centímetros y pesa 1,5 kilos aproximadamente. Se puede decir que el feto está completo, pero todavía es importante perfeccionar algunas funciones y órganos. Los pulmones, por ejemplo.
El bebé podría respirar si naciera en este momento, pero sus órganos están inmaduros a pesar que el sistema nervioso controla la función respiratoria. Los párpados están totalmente formados y puede abrirlos y cerrarlos, puede que se chupe el dedo, tenga hipo o llore. Su piel ya no está arrugada porque bajo ella, que todavía presenta un color rojizo, se ha formado una considerable capa de grasa. Por otra parte, el volumen del líquido amniótico ha empezado a disminuir, ya que el feto cada vez ocupa más espacio en el útero, lo que le impide moverse tanto como hace unos meses.
La madre generalmente manifiesta dificultades para encontrar una postura cómoda al dormir. Siente dolor en la parte inferior del abdomen. Sus pechos comienzan a secretar una sustancia acuosa llamada calostro, que puede salir en pequeñas cantidades y que será luego del nacimiento el primer alimento del recién nacido.
Octavo mes: En la etapa final
El bebé está completamente desarrollado. Cada día aumenta de peso, pudiendo llegar a subir 200 y 250 gramos en una semana. La grasa continúa acumulándose, lo que produce que la piel del feto pase de roja a rosada. Mide cerca de 44 centímetros y pesa 2,150 gramos. El pelo en la cabeza sigue creciendo y al final de sus dedos, allí donde terminan las huellas dactilares, ya se han formado unas diminutas uñas.
A excepción de sus pulmones, que están preparándose para nacer, todos sus órganos vitales están formados. Es sensible a la luz y puede contraer y dilatar el iris. También abre o cierra los ojos en función de si está dormido o no. Si es un niño, sus testículos ya han descendido a su lugar definitivo en el escroto y si es una niña sus labios menores son ya muy prominentes.
En cuanto a su sistema inmunológico, en este mes empieza la transmisión de anticuerpos vía placenta. Está desarrollando defensas para luchar contra ciertas infecciones. En esta etapa el feto traga buena cantidad de líquido amniótico, lo que le hace orinar hasta medio litro al día. Es probable que el feto voltee cabeza abajo y encaje su cráneo en la pelvis de la madre, preparando su posición para el parto. Si esto no sucede no hay razones para preocuparse, ya que algunos lo hacen en el último momento. Durante este mes se producen las llamadas contracciones de Braxton y Hicks, especie de práctica que realiza el útero antes del parto. Estas son leves, no duran más de treinta segundos y puede que la madre ni siquiera las perciba.
Último mes: La hora de nacer
Ya se encuentra totalmente formado y ha alcanzado la madurez que le permitirá vivir en el mundo exterior. En esta etapa se acomodará en la parte baja del abdomen, en preparación para el nacimiento, y
aunque puede parecer menos activo, es capaz de realizar más de 200 movimientos diarios. Está ganando peso a un ritmo de 30 gramos diarios. Pesa alrededor de 3,5 kilos y mide entre 48 y 52 centímetros. El perímetro de su cabeza es casi la longitud de su abdomen. A esta altura de la gestación, el lanugo -vello que cubre su cuerpo- está desapareciendo y el unto sebáceo -fina capa grasa en su piel- le servirá para permitir el deslizamiento del bebé en el canal del parto. Su cráneo no se ha osificado del todo y presenta fontanelas y suturas que terminarán por cerrarse meses después del nacimiento. Su sistema inmunológico todavía no está completo y recibe de la madre los anticuerpos a través de la placenta. Sus intestinos han comenzado a producir una sustancia llamada meconio, su primera feca, la misma que se eliminará después del nacimiento. Durante el último trimestre la madre puede sufrir dolores de espalda, acidez estomacal, inflamación en los tobillos, o falta de aire. Todos estos males pasarán, una vez que comience el trabajo de parto y finalmente su hijo nazca.
Precauciones
Las embarazadas deben tener una serie de cuidados especiales recomendados por los especialistas. La mayoría de precauciones que recomiendan los médicos tienen como fin evitar perjuicio alguno sobre la salud del bebé.
Algunas de las recomendaciones médicas más habituales son las siguientes:
- Evitar el consumo de tabaco, alcohol y cualquier otra sustancia nociva para la salud.
- Mantener una dieta equilibrada que contenga los aportes nutritivos necesarios.
- Evitar realizar grandes esfuerzos físicos.
- Mantener una actividad física regular, sin practicar deportes bruscos y siempre dependiendo de las circunstancias de cada embarazo.
- No consumir ningún medicamento que no sea recomendado por un médico que conozca el estado de gestación.
- Informar a los médicos del embarazo antes de someterse a alguna prueba médica como las radiológicas.
- Visitar al especialista con la frecuencia que éste recomiende.
- Evitar o prevenir enfermedades denominadas TORCHS que desarrollan problemas de bajo peso, CIUR y demas complicaciones.
Observaciones
Uno de los avances tecnológicos dentro de este campo, son las ecografías en cuatro dimensiones que permiten observar al feto con claridad y ser testigos de sus movimientos, gestos y sollozos. Además de apreciarse con claridad una mejor vista de la facie del feto lo cual aparte de diagnosticar defectos del desarrollo embrionario como el Labio Leporino, le proporciona a los futuros padres una vista panorámica del aspecto que tendrá el recien nacido.
Signos presuntivos del embarazo
Tal vez el primer signo presuntivo del embarazo sea la amenorrea o ausencia del período menstrual. Debido a que puede ocurrir amenorrea por causas distintas a un embarazo, no siempre es tomada en cuenta, especialmente si la mujer no tiene ciclos regulares. Sin embargo, pueden presentarse varios signos más que, junto a la amenorrea sugieren un embarazo, como son: la hipersensibilidad en los pezones, mareos, vómitos matutinos, somnolencia, alteración en la percepción de olores, y deseos intensos de ciertos tipos de alimentos (antojos). Esto lo puedes notar a partir del segundo al tercer mes de la concepción.
Fatiga
Otro signo de sospecha del embarazo es el cansancio, caracterizada por astenia, debilidad y somnolencia. Aunque algunas mujeres sienten renovada energía, la mayoría confesarían sentir intensa fatiga. Algunas afirman quedarse dormidas a cualquier hora del día, a veces al poco de haber salido de la cama, y otras aseguran sentir tal somnolencia en la sobremesa. Otras sienten cansancio pronunciado al llegar la noche. Dicha fatiga es a menudo incontrolable y exige el sueño. Nunca se ha encontrado una explicación a este extraño deseo de dormir. Es un síntoma frecuente en los primeros meses del embarazo y se cree que es un efecto de la elevada producción de progesterona. Esta hormona es un sedante para los seres humanos, con fuertes efectos tranquilizantes e hipnóticos. En las etapas posteriores se presenta otro tipo de fatiga debida simplemente a cansancio corporal, pero rara vez ocurre en el primer trimestre del embarazo.
Interrupción de la menstruación
Al cabo de dos semanas de ocurrida la fecundación se notará la ausencia de menstruación. El cese de la menstruación en una mujer sana en edad reproductiva y sexualmente activa, que hasta entonces ha tenido un ciclo menstrual regular y predecibles, es un signo muy sugestivo del embarazo. Es un signo sospechoso del embarazo denominado amenorrea y no es exclusivo de la gestación. Además del embarazo son causas de la amenorrea una enfermedad física, algunas de cierta gravedad—tumores del ovario, trastornos de la glándula tiroides y muchos otros—un choque muy fuerte, anorexia, el efecto de un viaje en avión, una operación, estrés o la ansiedad pueden retrasar la menstruación.
En ocasiones, después de la concepción, se observan uno o dos episodios de hemorragia uterina que simulan la menstruación y se confunden con ella. Es denominado signo de Long-Evans y es más frecuente en multíparas que en primigestas.
Gustos y antojos
El cambio en el gusto y la preferencia por ciertos alimentos puede ser uno de los primeros signos. Es común el rechazo a ciertos alimentos, bebidas y olores como el humo de los cigarrillos. A menudo se describe un sabor metálico en la boca que hace variar el gusto por los alimentos. Se cree que los antojos se deben al aumento de los niveles hormonales; a veces se experimentan en la segunda mitad del ciclo menstrual por el mismo motivo. No satisfaga antojos con alimentos de alto contenido calórico, cuyo poder nutritivo sea bajo.
Deseos frecuentes de orinar
A medida que se extiende el útero, oprime la vejiga. Por tanto, ésta trata de expulsar pequeñas cantidades de orina, y muchas mujeres sienten deseos frecuentes de orinar desde la primera semana tras la concepción; quizás necesiten ir al cuarto de baño cada hora. Esto también se debe al efecto de la progesterona, ya que es un potente relajante de músculo liso, (que es el músculo del cual está formado la vejiga, el útero y otros órganos) lo cual sirve para manterner al útero en reposo hasta el momento del parto. Salvo que sienta ardor o dolor al orinar, no es necesario que consulte al médico. Hacia las 12 semanas, el tamaño del útero aumentará, de modo que subirá y saldrá de la cavidad pelviana. Esto reducirá la presión sobre la vejiga y la frecuencia de la micción por lo que la vejiga se va hacia un lado.
Cambios en las mamas
Ocurre congestión y turgencia en los senos debido al factor hormonal y la aparición del calostro. Puede aparecer en etapas precoces de la gestación por el aumento de la prolactina, entre otras hormonas. Las areolas se vuelven más sensibles e hiperpigmentadas.
Manifestaciones cutáneas
Existe una hiperpigmentación de ciertas áreas de la piel durante el embarazo. Aparecen también en algunas embarazadas estrías abdominales y a nivel de las mamas. En otras pacientes se nota la aparición de cloasmas a nivel de la piel de la cara. Estas hiperpigmentaciones pueden presentarse con uso de anticonceptivos orales y en enfermedades del colágeno, mientras que las estrías son también un signo en el síndrome de Cushing.
Mucosa vaginal
Como consecuencia del aumento en la vascularización de la vagina y el cuello del útero durante el embarazo por el efecto vascularizante de la progesterona, se nota que la mucosa de estas estructuras se vuelve de un color violeta. A este cambio azulado de la mucosa vaginal y del cuello del útero se lo conoce como el signo de Chadwick - Jacquemier.
Signos de certeza de un embarazo
Los signos positivos de certeza de un embarazo consisten en poder demostrar sin error la presencia de estructuras embrionarias mediante ultrasonido y otras imágenes radiológicas.
Actividad cardíaca fetal
La identificación de pulsaciones cardíacas fetales separadas y distintas de las de la madre asegura el diagnóstico del embarazo. Se puede auscultar la actividad cardíaca fetal con un estetoscopio o un fetoscopio especial o con una ecografía Doppler. El latido cardíaco fetal es rápido—entre 120 y 160 latidos por minuto—y puede ser identificado con exactitud a partir de la semana 19 y 20, excepto en mujeres obesas en las que se dificulta escuchar el foco fetal.
Rastreo ecográfico
En cualquier momento del embarazo, en especial en presencia de un feto maduro en la segunda mitad del embarazo, es posible demostrar por ecografía transabdominal bidimensional o tridimensional tanto sus partes anatómicas como el saco vitelino.
Alimentación en el embarazo
Durante la gestación todo lo que entra por la boca tiene importancia, lo que consume la madre la alimenta a ella y a su bebé y debemos encontrar el equilibrio entre cuánto comer y lo que comer. Muchas mujeres se alimentan mal, acuden a las calorías poco nutritivas de los alimentos fáciles de comer que atenúan sus ardores o angustias matutinas.
En los primeros meses, acuden a un picoteo irrefrenable por combatir el hambre canina que se despierta y muchas veces pierden la cuenta de las calorías ingeridas. Otras, por el contrario, se obsesionan por no ganar demasiado peso durante su embarazo, de esta manera podrán tener una figura estupenda al poco de dar a luz, a imagen de las modelos actuales; para ello, disminuyen los alimentos y tiran de sus propias reservas y, con ello, pueden poner en riesgo el desarrollo del su bebé.
Es sumamente importante cuidar la alimentación cuando estamos encinta, ya que es decisivo para el buen desarrollo del feto que la mamá coma bien en calidad y en cantidad. Una mala alimentación puede causar al sobrepeso o la falta de acumulación de grasas tan importantes en el embarazo y la lactancia, y para el crecimiento del bebé. No se debe tener miedo a engordar, nuestra matrona o ginecólogo nos dirá cuál es el ritmo de aumento de peso en cada caso en particular.
De media, una mujer gestante debe engordar durante toda su gestación de 10 a 15 kg dependiendo de su constitución y del peso de partida antes del embarazo (en ningún caso, es recomendable menos de 9 kilos). Partir de un peso ideal antes de quedar embarazada es ideal, así sólo han de incrementar algo más la ingesta de calorías durante el segundo y tercer trimestre. Si engordamos algo más podremos reducirlo durante la lactancia, siguiendo una dieta baja en carbohidratos.
La alimentación ha de ser variada y nutritiva, consumiendo grupos básicos como los lácteos, carnes, pescados, huevos, cereales (preferentemente integrales), legumbres y frutos secos, así como frutas y hortalizas ( para garantizar los aportes de hierro, calcio, ácido fólico). Evitar las harinas y azúcares refinados, fritos y alimentos precocinados.Seguir una dieta ideal en el embarazo es el aliado perfecto para tener un hijo sano y para recuperar la figura después de dar a luz, si bien podemos permitirnos algún antojo que otro ¡no se está embarazada todos los días!
Hinchazón
Las causas comunes de la hinchazón en la embarazada son:
- Por la retención de líquidos. La mujer embarazada retiene más líquidos, lo cual se mezcla a la sangre, dejándola más diluida.
- Por el aumento de la sangre circulante, debido al agua. La sangre sale del corazón, sigue para las piernas y los pies y, al momento de volver a la parte superior del cuerpo, se encuentra con más resistencia, lo que causa más presión, y hace con que el agua de la sangre fluya por las paredes de las venas.
- Por la compresión de región pélvica. El desarrollo y crecimiento del feto puede comprimir más la región pélvica.
- Por un embarazo múltiple. El útero tiene más peso lo que significa un comprometimiento de la circulación.
- Por las elevadas temperaturas.
- Por un gran aumento del peso de la mujer.
Ácido fólico en cápsulas y alimentos
Algunos estudios demuestran que las mujeres que consumen la cantidad recomendada de ácido fólico (determinada por el médico), antes de estar embarazada y, durante los primeros meses del embarazo, pueden reducir el riesgo de dar a luz a un bebé prematuro, con bajo peso al nacer, o con defectos de nacimiento en el cerebro (anencefalia, cuando el bebé nace sin cerebro o con sólo parte del mismo, y no puede vivir ), en la columna vertebral (espina bífida, cuando la columna vertebral del bebé no se forma correctamente), y en el labio y palato (labio leporino).
Tomar ácido fólico antes del embarazo es importante para la prevención de estos defectos, que se desarrollan muy pronto: sólo a las tres o cuatro semanas después de la concepción.
Reduce el riesgo de espina bífida
Tomar ácido fólico es una medida de prevención sencilla y de una eficacia espectacular; tanto que previene en un 78 por ciento la espina bífida en el feto, una patología que afecta al cierre del tubo neural y que llega a ser muy incapacitante.
El déficit de ácido fólico y la genética son los dos factores de riesgo principales que inciden en la espina bífida, una malformación congénita motivada por un defecto en la formación del tubo neural que produce una falta de cierre de los arcos vertebrales posteriores, dejando al descubierto la médula espinal y las meninges. Esta circunstancia puede producirse ya en las primeras semanas de gestación, antes de que el test de embarazo de positivo, el feto puede presentar esta malformación, asegura el especialista.
Para evitar esos problemas, si estás embarazada o quieres estarlo, toma ácido fólico. Antes del embarazo, debes tomar 0,4 mg de ácido fólico al día, y si ya estás embarazada, unos 6 mg de ácido fólico/día.
La ingesta de ácido fólico no solo beneficia al bebé, sino también a hombres y mujeres, de todas las edades. El ácido fólico cumple un papel importante en la producción de los glóbulos rojos y, por esa razón, beneficia también a las personas que tienen algún tipo de anemia. Está demostrado que puede reducir el riesgo de enfermedades cardíacas, derrames cerebrales y de algunos tipos de cáncer.
Alimentos ricos en ácido fólico
Esta vitamina se encuentra principalmente en vegetales de hoja verde, frutas cítricas, frijoles, vísceras y verduras. Los alimentos que contienen más ácido fólico son naranja, plátano, brócoli, espinaca, guisante, espárrago, habas, cacahuetes, lentejas e hígado de pollo.
Otros alimentos como la harina, el arroz, la pasta, el pan y los cereales pueden contener ácido fólico añadido en su fabricación. Si miras la etiqueta de los envases, podrás saber la cantidad de ácido fólico que contienen.
Prevención de estrías
No hay nada que altere más a la autoestima de la mujer embarazada cuando ella nota que le salieron estrías en la piel. La gestación sigue su ritmo normal, ella disfruta de su embarazo, pero de repente la aparición de estrías en su barriga o en otra parte de su cuerpo, puede generarle un bajón emocional, que le hará sentirse insegura y abatida.
Los cambios hormonales, vasculares e inmunológicos que surgen en la mujer durante el embarazo, acaban provocando algunos cambios muy visibles en su piel. La piel de la embarazada es más susceptible a algunas alteraciones, y por eso es necesario que ella adopte algunas medidas de prevención a problemas como las manchas, la sequedad, las irritaciones, celulitis, y estrías. Nueve de cada 10 mujeres presentan estrías en el embarazo.
Las estrías son líneas, bandas o franjas que aparecen en la piel, de forma irregular, parecidas a las cicatrices, y que suelen salir entre el sexto y el séptimo mes del embarazo, en la barriga, pechos, glúteos, muslos o brazos.
Las estrías son producidas por la ruptura de fibras de colágeno y elásticas del tejido de la piel, debido al estiramiento excesivo de la piel durante el embarazo y la lactancia, o cuando se experimenta un aumento de peso. La predisposición genética para tener bebés de alto peso y el aumento de la actividad de la glándula suprarrenal son también otros factores que llevan a la mujer presentar estrías, que pueden ser de color blanco, rosado o nacarado.
Felizmente, las estrías son un problema apenas estético, que no afecta ni a la salud de la madre ni la de su bebé.
Mejor que tratar las estrías es prevenirlas. Para eso, si estás embarazada busque mantener un peso apropiado durante toda la gestación con una sana y adecuada dieta, utilice cremas hidratantes con vitaminas A y D, y no dejes de practicar algún ejercicio físico.
En el caso de que ya tengas estrías, no te desesperes. Aunque las estrías sean muy difíciles de eliminar por completo, se puede disimular y mejorar su aspecto. Dentro de los tratamientos naturales para las estrías durante el embarazo, están las aplicaciones y masajes con aceites de almendras, rosa mosqueta, lavanda, naranja y geranio.
La vitamina E mezclada con una crema anti estrías puede ayudar a regenerar la piel. Una crema muy bien tolerada y que se puede utilizar durante el embarazo, ya que no posee contraindicaciones, es la crema de caléndula. La crema de caléndula se obtiene a partir de la planta Calendula Officinalis, que posee diferentes propiedades beneficiosas para la piel como regenerar las fibras epiteliales y desinflamar y cicatrizar la piel lastimada y agrietada.[1]
También se usan técnicas dermatológicas como el peeling, la microdermoabrasión, y el láser. Pero es recomendable que antes de elegir algún método para reducir las estrías, que lo comenten y consulten con el médico.
Embarazo sano
Consejos para quedar embarazada
No siempre es fácil conseguir un embarazo. Muchas mujeres, por más que se empeñen en quedar embarazada no lo consiguen. Algunas llegan a desesperarse mientras otras acuden a los tratamientos de fertilidad o experimentan algunos métodos y remedios caseros. Investigando sobre el tema, aparecen algunas ideas.
Los remedios y trucos naturales, a los que recurrían las abuelas. Es lógico que no se puede comparar la facilidad que tenían ellas para conseguir un embarazo con la de las mujeres de la vida moderna.
El estrés, así como el cansancio, las múltiples tareas y los horarios incompatibles de hoy en día, muchas veces son factores que hacen del embarazo algo casi imposible.
Consejos si desea quedar embarazada, algunas maneras:
- Método sinsotérmico. Consiste en identificar los días fértiles e infértiles del ciclo menstrual a partir de la observación de la temperatura corporal basal y de las sensaciones que lo acompañan. Elija un termómetro y empieza a tomar la temperatura, en la boca o vía anal o vaginal, cuando se acaba la regla, hasta la siguiente menstruación. Hay que hacerlo todas las mañanas y a la misma hora, antes de levantarte de la cama. Hacer un gráfico, y apuntar la temperatura todos los días.
- La mujer sabrá que ha ovulado cuando, después de varias temperaturas anotadas, aparece una subida de, al menos, 2 décimas por encima de seis anotaciones anteriores, y esta subida se mantiene tres días seguidos. Si añades dos días antes del primero y dos días después del último, estos serán los días de tu máxima fertilidad, los días en que podrás quedarte embarazada si realizas una relación sexual.
- La mucosidad. El moco cervical es una mucosidad que expulsa el cuello uterino o cérvix, que varía de textura según los días del ciclo. Se presenta pegajosa en los días previos y posteriores a la ovulación, y líquida con cristalitos durante la ovulación. Se puede observarla por la noche, antes de acostarse. Desde su observación, podrás conseguir un embarazo.
- Remedios naturales y caseros: Posición después de una relación sexual: Debes mantenerte en la cama, boca arriba y ponte una almohada o algo que mantenga tu cola elevada; debes mantenerte en esta posición por media hora. Eso permitirá que el semen permanezca más tiempo en tu útero y ofrezca más posibilidades de que actúen.
- Alimentación sana: Aparte de consumir alimentos ricos en proteínas e hidratos de carbono, dicen que la jalea real promueve la fertilidad. El té de caléndula tiene efectos similares. Limpia el tracto vaginal de forma natural y puede regular el ciclo menstrual. Beba esta infusión a diario, buscando tener relaciones sexuales especialmente en dos días de más fertilidad.
- El control de la mente: Sabemos que es difícil, pero tienes que relajarte, dejar de lado esa ansiedad que te atrapa y olvidarte un poco de ese problema. Ten paciencia, aleja el estrés y la angustia porque pueden bloquear la fertilidad.
- Abandonar hábitos: De fumar y de beber. El alcohol puede disminuir la inmunidad. Busca llevar una vida sin vicios y saludable.
Consecuencias que produce el alcohol en el embarazo
Una revisión de investigaciones sobre el consumo de alcohol durante el embarazo dejan al menos dos enseñanzas: una, que las gestantes, por los daños que inevitablemente originará a su hijo por nacer, deben eliminar las bebidas alcohólicas de sus hábitos; y, la segunda, lo difícil que les resulta a obstetras y pediatras recabar información exacta y confiable de las madres, pues, como regla y como ocurre con otras adicciones, niegan que estén consumiendo alcohol. Desde hace más de dos décadas los científicos describieron el denominado síndrome de alcoholismo fetal desencadenado por la ingesta de alcohol durante el embarazo.
Síndrome de alcoholismo fetal
Un síndrome es un conjunto de síntomas y signos interrelacionados entre sí. En este caso es la denominación dada a un patrón de defectos congénitos, físicos y mentales inespecíficos e irreversibles que puede presentarse en el 40% de los recién nacidos de madres con alcoholismo crónico.
Características, lesiones o trastornos puede originar
- Retardo del crecimiento fetal y también del niño o la niña después del parto.
- Anomalías típicas del cráneo y de la cara, y alteración cerebral.
Retraso mental como consecuencia del alcohol
- Es la primera causa identificada de retraso mental.
- La tercera de malformaciones congénitas.
- El causante de anomalías número uno en el mundo occidental.
Lo importante es saber que todo ello se puede prevenir completamente.
Efectos dañinos del alcohol sobre el feto
- Entre ellos favorece la muerte de neuronas y disminuye la absorción de proteínas, vitaminas y minerales esenciales para el crecimiento fetal.
¿Cualquier dosis es capaz de lesionar al feto?: No está determinada la "dosis segura" para una mujer embarazada. Se recomienda, por tanto, la abstinencia total.
Riesgos al tomar una copita de vino o un vaso de cerveza durante el embarazo:
- El riesgo siempre existe, con una sola ingestión (borrachera) o el uso de bebidas mezcladas, hay probabilidad de desarrollar el síndrome de alcoholismo fetal, o una variante.
Suspensión de alcohol durante la gestación con antecedentes de alcoholismo:
- El período más vulnerable está entre las primeras 8 semanas de embarazo. No obstante, procesos complejos del sistema nervioso central ocurren en el segundo y el tercer trimestres. La suspensión brusca puede desarrollar el síndrome de abstinencia alcohólica que pone en peligro la vida de la mujer.
Detección de las alteraciones originadas por el síndrome de alcoholismo fetal:
- La mayoría de las características distintivas de este síndrome puede ser detectada por los controles habituales que se les realizan a las gestantes y al recién nacido.
- Existen varios factores que determinan la susceptibilidad individual, pero es bueno recordar que los efectos pueden verse también a largo plazo con patrones de inadaptación familiar, escolar y social.
Influencia del alcoholismo en el hombre para la concepción de un hijo
- Está demostrado que afecta la síntesis y secreción testicular de testosterona con anomalías morfológicas del espermatozoide y trastorno sexual con impotencia permanente. Pero lo más importante en este aspecto parece ser la influencia en los hábitos de consumo de su pareja.
Consejo
- La dramática realidad es que las adicciones han aumentado en las mujeres, y en edad fértil, por lo que ello implica un reto para la familia, las instituciones de salud y la sociedad en general donde prevenir, será siempre mucho más eficaz que curar. Por lo que se debe de tomar un estricto control no tanto por las instituciones que lo meriten sino, un tanto por las personas afectadas por este hábito.
Véase también
- Anexo:Higiene durante el Embarazo
- Alimentación en el embarazo
- Alcoholismo en mujeres embarazadas
- Alimentos en el embarazo
- Cambios físicos y fisiológicos en el embarazo.
- Anexo:Ejercicio físico en el embarazo
- Anexo:Embarazo y VIH
- Embarazo Asunto de Dos (Libro)
- Embarazo Molar
- Embarazo Prolongado
- Embarazo abdominal
- Embarazo y Epilepsia
- 11 Semanas de Embarazo
Fuentes
- www.enfemenino.com
- Luis E. Tsng, Juan F. Mere. Ginecología y Obstetricia. Vol. 42 Nº3 diciembre de 1996
- Elgueta V, Patricia . "Diagnóstico del Embarazo". Universidad de Chile - Facultad de Medicina, Escuela de Obstetricia.
- CareFirst BlueChoice, Inc. Blue Cross and Blue Shield Association. "Molestias durante el embarazo". http://www.yoteca.com/pg/Informacion-de-embarazo.asp
- Alcohol y Embarazo www.nacersano.org/
- Alcohol y Embarazo www.babysanito.com/
- Alcohol y Embarazo www.crecerjuntos.com.ar/