Fray Bartolomeo
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Fray Bartolomeo o Fra Bartolommeo. Considerado uno de los grandes artistas del Renacimiento en Florencia. Su nombre original era Baccio della Porta, tomando el nombre de Fray Bartolomeo en el año 1500 cuando llegó a la orden Dominicana.
Síntesis biográfica
Su verdadero nombre era Baccio della Porta. Nació en Florencia 1472 y se formó en el taller de Cosimo Roselli. Su primera obra La anunciación (1497; Catedral de Volterra), muestra su asimilación de la representación de los complicados ropajes que aparecen en los cuadros de su contemporáneo Lorenzo di Credi. En 1499 comenzó la parte superior del Juicio Final para Santa María Nuova (actualmente en el Museo di San Marco de Florencia), obra que no llegó a terminar porque, por influencia de Savonarola, se retiró hacia 1500 al monasterio dominico de San Marcos. La obra citada fue completada por Albertinelli (1474- 1515), y muestra en embrión los principios artísticos desarrollados más tarde por los grandes maestros del Alto Renacimiento.
Alrededor de 1514 Fra Bartolommeo visitó Roma, y el dinamismo y el contrapposto de sus cuadros posteriores demuestran que allí vio las pinturas de Rafael. Esto se observa, por ejemplo, en las heroicas figuras de San Pedro y San Pablo, la primera de las cuales no llegó a terminar, pintadas para San Silvestre en Roma (actualmente en los Museo Vaticanos), y en retablos como la Virgen de la Misericordia (1515; Pinacoteca Nazionale del Palazzo Ducale, Lucca) y el Salvator Mundi (1516; Palazzo Pitti, Florencia) que se le encargó a su regreso a su ciudad natal. Murió en el año 1517.
Influencias artísticas
Fra Bartolommeo estuvo influenciado por Leonardo al volver éste a Florencia en 1500. Su Visión de San Bernardo (Galería dell´ Academia, Florencia), comenzada en 1504, muestra los complicados ropajes típicos de la pintura del Quattrocento, pero también hay influencias ya del sfumato leonardesco y se emplean unos tonos más suaves. De todas formas, Fra Bartolommeo no estuvo influido por el claroscuro de las últimas obras de Leonardo; en este sentido, fue fundamental para él una visita a Venecia en 1508; allí entró en contacto con los colores del arte veneciano más vivos y brillantes. La influencia veneciana se observa, por ejemplo, en Los desposorios de Santa Catalina (1511; Louvre, París), que muestra un conocimiento previo del retablo de Bellini La Virgen y el Niño rodeados de Santos (1505; Iglesia de San Zaccaria, Venecia), aunque las figuras pintadas por Bartolommeo tienen una voluminosidad que es más propia del centro de Italia y que sólo puede deberse a influencias de Leonardo.
Por esta época Fra Bartolommeo era ya un artista consagrado del Alto Renacimiento y el equilibrado esquema de Los desposorios de Santa Catalina, que también presenta influencias de la obra de Rafael La Virgen del baldaquino (1507- 08; Galería Palantina di Palazzo Pitti, Florencia), aparece en obras posteriores, en la que los sagrados, personajes están dispuestos en gradas, en medio de un grandioso entorno arquitectónico. La interacción de equilibrio y contraste entre las formas se va haciendo cada vez más compleja, mientras que el movimiento de las figuras sigue siendo amable y delicado. El conjunto de la obra resulta muy dulce.
Características de sus obras
En las obras mencionadas arriba hay una energía que no se encuentra en sus cuadros anteriores. Las figuras se contraponen vigorosamente, y la arquitectura – por ejemplo, le sirve de fondo al Salvador Mundi- muestra un profundo conocimiento, por parte del autor, de la obra realizada por Bramante en Roma. Sigue habiendo ternura en las obras más personales y logradas de Bartolommeo, y ésta es la característica principal del arte del pintor florentino: se observa, por ejemplo, en la conmovedora humanidad de La presentación de Cristo en el templo (c. 1516; Kunsthistorisches Museum, Viena), una de sus últimas obras.
Fuentes
- Enciclopedia universal de la pintura y la escultura. Madrid: Sarpe, 1982. t.4.