Luis de las Casas
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Luis de las Casas y Arragorri . Conde de Aranda. Gobernador y Capitán General de Cuba, y Gobernador de Luisiana y Florida (1790-1796). Con accionar reformista dio un florecimiento sin precedentes a la economía. Comenzó la entrada de colonos y esclavos tras el inicio de la revolución en Santo Domingo.
Sus primeros años
Nació en Sopuerta, Vizcaya, España, el 25 de agosto de 1745. Recibió su primera educación en tierras vascas, hasta que debido a los contactos de su familia en la corte, consiguió una plaza de paje del rey a la edad de 13 años, a través del conde de Aranda.
En julio de 1759 obtuvo la plaza de cadete en el Regimiento de Cantabria y en 1762 fue ascendido a capitán. Ese mismo año fue destinado a la expedición a Portugal —englobada en la Guerra de los Siete Años—, donde sirvió de ayudante de campo del teniente general conde de Ricla. En esta campaña recibió las primeras lecciones prácticas del arte de la guerra bajo el por aquel entonces brigadier Alejandro O'Reilly, que sería su cuñado y protector.
En 1769 participó en la expedición del mismo O'Reilly para ocupar la Luisiana, cedida por Francia, ya con el grado de teniente coronel. Allí desempeñó el empleo de sargento mayor de Nueva Orleans hasta el regreso de la expedición a Cádiz en mayo de 1770. Poco después fue ascendido a coronel.
En marzo de 1772 sus ansias de aventura y vocación militar le llevaron a iniciar un viaje por distintos países europeos. En 1773, sirvió de voluntario en las filas del ejército ruso contra los turcos sobre las orillas del Danubio y del Mar Negro. De Rusia viajó a Berlín, en junio de 1774, donde fue presentado a la familia real prusiana: Conoció de primera mano el ejército prusiano y austriaco, y de allí continuó su viaje a Holanda, Bélgica, Inglaterra y Francia, hasta que hubo de regresar a España para formar parte de la expedición contra Argel, en 1775, como coronel del Regimiento de Infantería de Saboya. Su actuación en aquella fracasada operación le valió el ascenso a brigadier.
Con motivo del inicio de las hostilidades contra Inglaterra acudió con el regimiento de su mando al bloqueo de Gibraltar en 1779, donde permaneció dos años, y posteriormente a la expedición que reconquistó Menorca en 1782. Fue ascendido a mariscal de campo y, poco tiempo después, se le concedió la comandancia general de Orán, donde permaneció hasta abril de 1789. A los 37 años (1782) pasó a ocupar el cargo de inspector del ejército y comandante general de Orán, permaneciendo hasta su nombramiento al mando de la capitanía de Cuba, Luisiana y Florida.
Gobernador de Cuba
El 8 de julio de 1790 cesó como Gobernador de Cuba Domingo Cabello y Robles, siendo reemplazado por Luis de las Casas, fungiendo también como capitán general de Cuba, la Luisiana y Floridas. Se distinguió por la labor realizada en servicio público.
Fue apreciado y distinguido por las familias representativas de rancio abolengo de la sacarocrasia de la Cuba colonial. En demostración de afectos, estimaron muy prudente el hecho de favorecerlo y "ayudarlo", a cambio de un comprometedor compromiso de que éste le brindara protección para sus asuntos e intereses. Se hicieron pactos y acuerdos simbólicos de "sólida amistad entre muy seguros y fieles amigos", o sea entre él, la sacarocrasia y sus "muy indulgentes y seguros amigos". El Ingenio Alejandría, en Güines, a menos de un kilómetro de la Villa, aparecía en documentos oficiales que afirmaban que su propietario era el Conde de O´Reilly, pero a ciencia cierta se conocía que el genuino dueño era su tío Luis de las Casas. Los ricos hacendados, por suscripción colectiva, le regalaron el ingenio "Amistad", también en Güines, ubicado aproximadamente a dos kilómetros de la población.
Se le considera como uno de los mejores gobernantes de la isla durante todo el periodo colonial. Dio un fuerte impulso a las obras públicas en la capital y sus alrededores (caminos, puentes, empedrado de las calles de la ciudad, etc.). Mostró especial preocupación por la asistencia pública, fundando la Casa de Beneficencia. Promovió los estudios científicos y técnicos. Realizó el primer censo confiable de toda la isla. Durante su gobierno se inició el gran despegue de la industria azucarera que convertiría poco después a la isla en la primera productora y exportadora mundial de dicho producto.
Por tanto, con su accionar reformista, durante su período hubo un vuelco de la economía, logrando un florecimiento sin precedentes. En 1791 comenzó la revolución en Santo Domingo, lo que produjo la ruina de sus plantaciones. Haití elaboraba el 30 % de la producción mundial de azúcar y abastecía el 50 % del consumo, y su producción en 11 años bajó de 64 mil toneladas a unas 8 mil. Unos 30 mil productores cañeros y cafetaleros emigraron a Cuba con sus esclavos y a establecer sus cultivos, fundamentalmente en la zona oriental. Traían sus conocimientos en la agricultura, mucho más avanzados que los de los colonos españoles establecidos en Cuba. De 1791 a 1804 se establecieron en Cuba unas 30 000 personas, de las cuales las dos terceras partes eran negros y mulatos, libres y esclavos.
Parejamente comenzó a subir el precio del azúcar, subiendo de 2 reales la arroba hasta 24 reales. Algo similar sucedió con el café. El 31 de octubre de 1790 apareció el "Papel Periódico de la Habana", primer periódico literario-económico publicado en Cuba.
El 6 de junio de 1792 se creó por Real Decreto La Sociedad Económica de Amigos del País, una de las más activas de toda la monarquía, de la que fue su primer presidente, así como el Consulado de Agricultura y Comercio de La Habana. Por Real Cédula de fecha 15 de diciembre de 1792, el entonces rey de España, Carlos IV, concedió autorización para establecer en La Habana esta sociedad, surgida al calor de otras similares ya existentes en España y en algunos países suramericanos. Tras vencer ciertas dificultades de carácter administrativo-legal se celebró la primera sesión oficial el día 9 de enero de 1793, y al gobernador de la isla Luis de las Casas se designó en el acto de constitución de la Sociedad como Socio y Primer Presidente de Honor y Socio Protector del Cuerpo Patriótico. Fueron socios fundadores, entre otros, Francisco Joseph Basabe, Juan Manuel 0'Farrill, el conde de Casa Montalvo, Francisco de Arango y Parreño, Diego de la Barrera, José Agustín Caballero, Antonio Robledo, Tomás Romay, y Luis Peñalver, su primer director. El 4 de junio de ese año la Sociedad Económica abrió la primera biblioteca pública con que contó la Isla.
El 11 de julio de ese año se emitió Cédula Real creando el poblado de Manzanillo, en la actual provincia de Granma. El 25 de abril de 1793 fue erigida la Diócesis de Louisiana y las dos Floridas como sufragánea de Santo Domingo. El 8 de diciembre de 1794 fue inaugurada oficialmente la Casa de Beneficencia y Maternidad de La Habana, en las calles de San Lázaro y Belascoaín. En 1794 fue creado en La Habana el Real Consulado de Agricultura y Comercio. A raíz de la Paz de Basilea, en 1795 En 1795, por el Tratado de Basilea el territorio de Santo Domingo fue cedido a Francia, y como consecuencia de ello desapareció la Arquidiócesis de Santo Domingo y el 20 de diciembre de ese año fueron exhumados los restos de Cristóbal Colón del Altar Mayor de la Catedral de Santo Domingo para ser trasladados a Cuba.
El 8 de mayo de 1796 fue introducida en Cuba desde Otahití, la variedad de caña de azúcar que lleva ese nombre, de mucho mayor rendimiento y calidad que las anteriormente existentes en la isla. Además, para incentivar el desarrollo de la producción de azúcar, De las Casas estableció una cátedra de química azucarera, con un maestro londinense. El 25 de marzo de 1791 llegó a Cuba el prócer americano Simón Bolívar a bordo del buque San Idelfonso.
Luis de las Casas permaneció al frente del gobierno de Cuba hasta el 6 de diciembre de 1796, en que fue reemplazado por Juan Procopio Bassecourt.
Nuevos cargos y fallecimiento
En 1797 asumió de nuevo el grado de Capitán General del ejército, por lo que abandonó la isla de Cuba y volvió a Madrid. Tras su llegada a la capital española fue nombrado capitán general del Reino de Valencia, —aunque renunció a este empleo por su delicado estado de salud— y posteriormente vocal de la Junta Suprema de Caballería.
En diciembre de 1799 tomó posesión del gobierno de la plaza de Cádiz, cargo que desempeñó junto con la capitanía general de Andalucía hasta su muerte, ocurrida el 19 de julio de 1800 en el Puerto de Santa María, después de haber ingerido alimentos preparados en una vasija de cobre mal estañada. En su testamento, fechado el 11 de julio, solicitó ser enterrado en la Iglesia Mayor Prioral de Cádiz con un entierro «lo más sencillo y liso que sea posible sin género de pompa alguna».
Fuentes
- Arcadio Ríos. Hechos y personajes de la Historia de Cuba. Recopilación Bibliográfica. La Habana, 2015. 320 p.
- Antonio José Valdez. Historia de la isla de Cuba y en especial de la Habana. En dos tomos. Volumen I. Oficina de La Cena. La Habana, 1881. Libro Sexto.