Lunenburg (Canadá)
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Ciudad vieja de Lunenburg. Fundada en 1753, es una ciudad de la provincia de Nueva Escocia, Canadá, cuyo nombre fue dado en honor al rey del Reino Unido de la Gran Bretaña e Irlanda, Jorge II, duque de Brunswick –Lünenburg. Es un importante puerto y un centro de construcción naval de notoriedad. Está considerada uno de los mejores ejemplos existentes de asentamiento colonial británico planificado en América del Norte, en el que se conservan su trazado original en forma de tablero de ajedrez, y una diversidad de tipologías arquitectónicas vernáculas, algunas de ellas que datan de la época fundacional. Integra la Lista del Patrimonio Mundial desde 1995.
Sumario
Los orígenes
El primer establecimiento formal de la ciudad se produjo en junio de 1753, con el desembarco de 1453 personas en la entonces llamada bahía de Merleguuish. A estos primeros colonos, reclutados de entre las congregaciones protestantes del valle superior del Rin, les fueron otorgados terrenos para asentarse y les proporcionaron las herramientas rudimentarias con las que pudiesen levantar sus casas. Se fabricaron empalizadas protectoras en las dos colinas que bordeaban el sitio; en lo más alto se edificó un fuerte de estrella en un extremo y un fortín en el otro. En un primer momento hubo rudimentarios cobertizos que fueron sustituidos por hileras de casa pequeñas: simples cuadrados de estacas clavadas en la tierra, cerrados con tablas y cubiertos con paja. La mayoría de los colonos reclutados eran agricultores, y en cuanto se estableció la ciudad, la población comenzó a extenderse hacia el campo y las parcelas fueron distribuidas como jardines, granjas o grandes terrenos. El asentamiento, de expresión predominantemente alemana, estaba relativamente aislado de Halifax en su puerto rodeado de bosques, y los agricultores tuvieron que adaptarse al agua para proveer primero madera y luego sus cosechas a dicha ciudad. Ese fue el comienzo de lo que sería más adelante su principal fuente de ingresos: la construcción de barcos, la pesca y el comercio. Lunenburg se extendió por las vecinas tierras comunales, y desaparecieron, con el tiempo, las empalizadas, el fuerte y el fortín. Se estableció un cementerio en la cima de la colina, y más tarde, aledaña a este se construyó una escuela.
Religión
En Lunenburg se encuentran las congregaciones luterana y presbiteriana más antiguas que existen de forma continuada en Canadá; ambas datan de 1753, aunque los edificios que ocupan son más tardíos. Los colonos originarios comenzaron a fundar sus iglesias. La iglesia anglicana de San Juan, situada en el edificio de la iglesia actual, fue utilizada durante algún tiempo por otras congregaciones. El edificio, levantado e la década de 1880 está considerado uno de los más bellos ejemplos de arquitectura gótica de carpintería.
La pesca y el comercio
Durante mucho tiempo la economía de la ciudad prosperó y menguó a la par de la de Halifax, así fue incluso durante la era napoleónica. Muchos habitantes se dedicaban aún a la agricultura, pero poco fue cada vez mayor el número de personas que se dedicaron a labores marítimas. La pesca y el comercio suplantaron a la agricultura como soporte principal de la economía local, y la ciudad se abrió a las influencias exteriores. Hacia 1829 la ciudad contaba con aproximadamente 100 navíos dedicados al comercio costero, al comercio exterior y a la pesca, y existían veintidós negocios abastecidos con géneros británicos y de las indias occidentales. El comercio se abrió más cuando, en 1839, la ciudad fue declara puerto franco. El primer buque de Lunenburg enviado a la región de los grandes bancos, la zona de la industria pesquera más productiva del Atlántico norte, fue la goleta La Unión, que pertenecía a Zwicker y Compañía, en 1856. En la década de 1870, los habitantes de Lunenburg revolucionaron el negocio de la pesca con a instauración del sistema de arrastre con esquifes dobles. Hacia 1880 había, aproximadamente, 150 goletas que pescaban fuera del Condado de Lunenburg, más o menos la mitad de la ciudad. Ya en 1920, la ciudad era uno de los centros principales de procesamiento de pescado fresco de Canadá. Actualmente, en Lunenburg se halla la fábrica de procesamiento más grande del país y es el puerto de matrícula de una considerable flota de traineras. Se siguen construyendo y reparando barcos y es unos de los pocos lugares de América que conserva técnicas tradicionales de construcción naval.
Arquitectura
Ciudad modelo
En 1753, Charles Morris, agrimensor de su Majestad Real, diseñó el trazado de las calles de Lunenburg. Estas se cruzan y remontan en terreno empinado entre dos colinas y dos bahías. Dicho trazado era la base del modelo de ciudad de la Gran Bretaña colonial y ya había sido puesto en práctica con anterioridad en Halifax, por el propio Morris y sus colegas de la Junta del Comercio y las Colonias. Es un plan lógico y austero, muy influenciado por cuestiones de índole militar: calles en y bloques regulares, espacios públicos, una plaza para desfiles, jardines y parcelas para el cultivo fuera de la ciudad.
Trazado de Lunenburg
La estructura topográfica de Charles Morris para Lunenburg constaba de seis divisiones de ocho bloques, más la línea de costa. Cada unos de los bloque tenía catorce lotes de 40 pies de ancho por 60 pies de fondo. Los cuatro bloques centrales se destinaron a terreno público en el que se levantarían el juzgado, los edificios administrativos, la iglesia y la plaza de armas. A cada división, Morris le dio el nombre de un administrador o de un oficial del ejército; cada calle vertical, además de la del Duque, y la del Príncipe, recibió el nombre de un gobernador; cada calle horizontal, a excepción de la calle Lawrence (también gobernador) llevó el nombre de un miembro destacado del Parlamento Británico o de la Junta de Comercio. Alrededor de la ciudad estaban las tierras comunales para el pastoreo y parcelas destinadas a la plantación de jardines. Más alejadas, fuera de la península de Lunenburg, estaban los terrenos cultivables, entre 30 y 300 acres que se utilizaron para la obtención de leña y para otros cultivos; a estos espacios se los llamó grandes terrenos (big lots). Aún existe la carretera de Big Lots.
Construcción tipo coulisse
A las primeras casas permanentes de Lunenburg se les llamó capes, fueron construcciones en técnica coulisse, traída por los colonos de sus lugares de origen. Las casas en coulisse eran estructuras en madera, normalmente con postes y vigas de 8x8 pulgadas. Se cortaban ranuras de cuatro pulgadas en las vigas verticales y se introducían en ellas los tablones horizontales. En estas construcciones no se utilizaban clavos. Los primeros capes contaban con dos aguilones sencillos de 90 grados montados sobre un habitáculo rectangular de una sola planta, de manera que se obtenía una casa de planta y media. Presentaban una ventana a cada lado de la puerta central, y una chimenea en el interior. Todos los capes, hasta los más sencillos, tenían sótano en el que se almacenaban las verduras para el invierno; a menudo estos sótanos fueron realizados con enormes cuadrados de granito traídos como lastre desde los puertos europeos. Todo ello estaba revestido por tablas que se calafeteaban con pelo de caballo y estopa. Las vigas se unían con espigas de madera, y las paredes exteriores se resguardaban con anchos tablones verticales machihembrados y luego se cubrían con una capa de listones. A excepción de la chimenea, los capes no tenían ningún otro apoyo interior para la planta superior, además de las vigas que se extendían a lo ancho de toda la casa, de delante hacia atrás, y que soportaban todo el peso dando cierta flexibilidad a la estructura. En Lunenburg, todavía se conservan algunos de estos edificios, aunque muchos han sido modificados a lo largo de los siglos.
Ampliaciones y cambios de estilo
A medida que la ciudad prosperaba y se extendía, muchos de los capes fueron reemplazados por casas más grandes, de dos pisos y medio, en estilo georgiano. La puerta central siguió dominando la fachada, pero se incorporaron un salón central y dos chimeneas grandes que conducían el humo de hasta ocho hogares. Empezaron a aparecer detalles decorativos en los tablones de las esquinas y en la vuelta de los aleros. Se hizo patente el gusto por los colores llamativos, tales como el rojo, el rosa y el verde. Hacia 1870 se difundió el empleo de anaqueles o rodillos elaborados, los dinteles con tracería en relieve y las buhardillas sobresalientes con faldones calados. El “saliente de Lunenburg”, característica vernácula extravagante e imaginativa consiste en una buhardilla de cinco lados que se convirtió, finalmente, en el sello arquitectónico de la ciudad. A estas alturas del desarrollo arquitectónico de la ciudad se puede encontrar una combinación de porches, pórticos, torres, plataformas elevadas, ventanas en saliente y decorativos trabajos de carpintería con extrema variedad de formas, muchos de los cuales sobresalen virtualmente sobre las aceras y se introducen en el espacio público.
La Academia de Lunenburg, que aún se utiliza como escuela para los niveles primarios, se construyó en 1895, después de que se incendiara una escuela anterior. Está adornada con mucho estilo y es magnífica en sus proporciones; se considera el ejemplo existente más bello del movimiento académico de la época. El conjunto de viviendas y edificios comerciales del Lunenburg moderno abarca todos los estilos del período colonial británico, pero la homogeneidad de los materiales (edificios de madera, revestimientos con tablas, decoración imaginativa, colores brillantes) le confiere unidad a la ciudad toda. Sólo unos cuantos edificios comerciales son de ladrillo y piedra. Lunenburg no llegó a ser una ciudad grande, sino que mantuvo su población, su estilo de vida y su economía basada en los recursos oceánicos casi inalterados durante más de doscientos años.
Patrimonio de la Humanidad
Por constituir uno de los más excepcionales ejemplos de la planificación urbana colonial británica en América, que conserva casi inalterables los presupuestos de su trazado original y una diversidad de tipologías arquitectónicas vernáculas, la ciudad vieja de Lunenburg fue incluida en la Lista del Patrimonio Mundial desde el año 1995.
Enlaces externos
Fuentes
- De Villiers, Marq. Ciudad vieja de Lunenburg. En Revista Patrimonio Mundial No. 23.
- Organización de las ciudades del Patrimonio Mundial
