Ramala (Palestina)

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Ramala
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Ciudad de Palestina
La ciudad de Ramala en los años 2010.
La ciudad de Ramala en los años 2010.
EntidadCiudad
 • PaísBandera de Palestina Palestina
 • GobernaciónRamala y Al Bireh
 • Fundaciónsiglo XVI
Población (2007) 
 • Total27 460 hab.
Gentilicioramalense

La ciudad de Ramala, Ramla o Ramallah es una ciudad palestina en el centro de Cisjordania, ubicada a solo 10 km al norte de Jerusalén ―capital espiritual de Palestina―,[1] a una elevación promedio de 880 metros sobre el nivel del mar, adyacente a Bireh.[2] Actualmente sirve como capital administrativa (de facto y provisional) de la Autoridad Nacional Palestina (ANP).

Ramallah fue históricamente una ciudad árabe cristiana.

Etimología

En árabe su nombre es رام الله (Rāmallāh), que significa ‘monte de Dios’, de «rām»: ‘monte’, y «Allāh»: ‘Dios’).

Descripción

La ciudad solo cuenta con un lugar relevante a visitar: la Mukata, sede de la Autoridad Nacional Palestina, asediada durante años por el ejército israelí, donde hoy se alza el mausoleo de Yasser Arafat. Pero esto también es provisional: cuando Palestina sea un Estado libre, Arafat será enterrado en la Explanada de las Mezquitas, en Jerusalén, como era su voluntad.[1]

En Ramala se encuentra la oficina del presidente de la ANP, Mahmud Abás (n. 1935).

Ramala es la ciudad más conocida de Palestina, ya que es allí donde suelen residir los diplomáticos, periodistas y cooperantes que se desplazan a Palestina. Está situada en Cisjordania, en un enclave lleno de pequeñas colinas, a 15 kilómetros al norte de Al Quds (que es el nombre que los musulmanes dan a la ciudad de Jerusalén). En su origen Ramala fue una ciudad cristiana, pero hoy día la mayoría de la población es musulmana. Sin embargo, aún persiste una importante colonia cristiana (25 % de la población) que convive sin problemas con los musulmanes. Ramala está conurbada con Al Bireh, la ciudad universitaria.[3]

La vida de Ramala gira en torno a la plaza de Al-Manara. Es una rotonda, con una fuente con leones en el medio, de la que parten las principales arterias de la ciudad. Restaurantes, pastelerías y hasta tiendas de zumos artesanos pueblan la plaza. Decenas de personas esperan allí a alguien o simplemente se sientan y ven pasar a la gente. No importa la hora que sea, siempre habrá gente: el repartidor de pan se junta por la mañana con los últimos diplomáticos juergistas, y de nuevo otro giro, y vuelta a empezar un nuevo día. No importa el día de la semana o del mes. Por no hablar de las multitudes que se juntan durante los festejos que se producen tras los partidos de fútbol. Sólo los bombardeos israelís son capaces de parar la vida de Al-Manara.[3]

El visitante no puede perderse la Muqataa, el complejo arquitectónico de la antigua prisión británica, que se ha convertido en el símbolo del nacionalismo palestino y en el que está enterrado nada menos que Yasir Arafat. En la Muqataa está provisionalmente la sede de la Autoridad Nacional Palestina, a la espera de que Israel permita el traslado a Al Quds. En 2002 la Muqataa fue casi enteramente destruida por Israel, pero en la actualidad a vuelto a renacer.[3]

Si uno se cansa de la comida árabe y la constante tensión de la zona, Ramala es capaz de hacer olvidar al occidental que se encuentra fuera de casa. Después de viajar por Cisjordania y soportar los tediosos checkpoints o las preguntas desafiantes de los soldados israelís, en Ramala uno puede sumergirse, por ejemplo, en el idílico Snowbar, donde puede disfrutar de una pizza o una hamburguesa al lado de otros europeos o americanos pegados a sus portátiles, en un ambiente de relativa tranquilidad. Cuando se pasa algún tiempo en Oriente Próximo, uno necesita ciertos momentos de evasión para recargar energías.[3]

En definitiva, en Ramala, el forastero no siente estar en un país musulmán. Es frecuente que se sirva alcohol en los bares y se ven muchas mujeres sin velo -aunque claro, sobre todo occidentales-. Es una ciudad tolerante con lo extranjero. Además, en los últimos años Ramala ha experimentado un importante boom inmobiliario, por la emigración de palestinos de los alrededores, atraídos por la escasez de bombardeos israelís y la posibilidad de encontrar empleo.[3]

Sin embargo, no todo es paz en Ramala. En los últimos años, ha habido una gran proliferación de asentamientos ilegales de colonos israelíes alrededor de Ramala, sobre todo en el camino que va hacia Al Quds, lo que dificulta la expansión de la ciudad. Es frecuente ver las provocaciones de los colonos a la población palestina. Si sigue el avance de los asentamientos en Cisjordania, otras ciudades palestinas desaparecerán antes que Ramala. Es más, quizás Ramala sea la última. Pero eso sí, cuando los colonos israelíes lleguen a la Muqataa, argumentando que les pertenece por algún derecho divino, el sueño palestino habrá acabado.[3]

Historia

La historia de Ramala es relativamente corta, sobre todo si se compara con la de Jerusalén. La ciudad fue fundada en el siglo XVI por los haddadin, árabes cristianos procedentes del río Jordán (a unos 30 km al este).

Entre el siglo XI y el XIII, el Señorío de Ramala (véase el artículo) fue uno de los estados vasallos del Reino de Jerusalén creado después de la Primera Cruzada.

Durante los siglos XVII y XVIII Ramala se desarrolló como una ciudad predominantemente agrícola y cristiana.

En 1908, obtuvo del Imperio otomano (Turquía) el título de ciudad. En 1917 los británicos invadieron la región, y Ramala estuvo ocupada hasta 1948. Debido a las penurias económicas, casi todas las familias cristianas ―la inmensa mayoría de la población― abandonaron la ciudad y fueron a buscar suerte a Estados Unidos. En esas décadas, cientos de familias árabes ―provenientes sobre todo de Khalil-Hebrón― se instalaron en la ciudad. En 1948, Reino Unido pasó la ciudad a manos jordanas.[3]

En 1967 Ramala fue ocupada por Israel tras la Guerra de los Seis Días. En la actualidad es de los pocos lugares en Palestina que no siguen ocupados. Tras los acuerdos de Oslo, Ramala quedó dentro de la llamada Zona A, donde las competencias legislativas y militares serían exclusivamente palestinas (en teoría).[3]

En diciembre de 2017 estallaron protestas en Cisjordania a raíz de que Donald Trump (empresario y presidente estadounidense) anunció que trasladaría la embajada de Estados Unidos a Jerusalén, como manera de reconocimiento de esa ciudad como capital exclusiva de Israel ―y no capital de Israel y de Palestina―. Las protestas en varias ciudades de Cisjordania, la Franja de Gaza y en algunos barrios de Jerusalén, durante las que se registraron choques entre los manifestantes y los policías, que dejaron decenas de muertos y cientos de heridos.[4]

Población

En el censo de 1922 de Palestina, realizado por las autoridades del Mandato británico, Ramala tenía una población de 3104 personas:

  • 2972 cristianos,
  • 125 musulmanes y
  • 10 judíos.[5][6]

En el momento del censo de 1931, esto había aumentado a 4286 personas en un total de 1014 casas:

  • 3766 cristianos,
  • 519 musulmanes y
  • 1 judío.[7]

En la encuesta de Samui Hadawi de 1945, la población había crecido a 5080, con los cristianos formando todavía la mayoría de la población.[8]

Sin embargo, la composición demográfica de la ciudad cambió drásticamente entre 1948 y 1967, cuando se produjo una considerable emigración de cristianos. En 1967, un poco más de la mitad de los 12 134 habitantes de la ciudad eran cristianos, y la otra mitad musulmanes.[9]

En 1987, la población había ascendido al doble: 24 722 habitantes. Sin embargo en 1997 había disminuido drásticamente a 17 851. En ese año (1997) el censo de la PCBS (Oficina Central Palestina de Estadísticas) reveló que había 17 851 refugiados palestinos (8 622 varones y 9 229 mujeres), que representaban el 60,3 % de la población.[10] Las personas menores de 20 años constituían el 45,9 % de la población, mientras que los que tenían entre 20 y 64 años eran el 45,4 %, y los residentes mayores de 64 años constituían el 4,7 %.[11]

Recién en 2005 la población llegó a más de 24 000. En 2006 ―según una proyección de la PCBS (Oficina Central Palestina de Estadísticas)―, Ramallah habría tenido una población de 25 467 habitantes.[12]

En el censo de PCBS de 2007, había 27 460 personas viviendo en la ciudad.[13] Las fuentes varían con respecto a la población cristiana actual en la ciudad, que varía alrededor del 25 %. Los musulmanes ahora forman la mayoría de la población (75 %).

Comparación con ciudades cubanas

Su población, que en 2007 alcanzó los 28 000 habitantes, equivale a la de las siguientes ciudades cubanas:

Fuentes