Serguéi Diáguilev
|
Serguéi Pávlovich Diáguilev (Gruzine, 31 de marzo de 1872 - Venecia, 19 de agosto de 1929), conocido también como Serge Diaguilev, fue un director artístico, crítico de arte y empresario ruso, fundador de los Ballets Rusos (1909-1929), una compañía de la que surgirían muchos bailarines y coreógrafos famosos que revolucionaron la estética coreográfica.
Síntesis biográfica
Nació en el cuartel de Selistchev, en la provincia rusa de Novgorod. Gracias a la asistencia de su cuñada y a la del médico del regimiento, nació sano en un parto muy difícil, pero días más tarde su madre falleció.
Cuando era pequeño, su casa siempre fue un centro de reunión de artistas y él hizo incursiones en la música, el canto y la pintura. A los 18 años comenzó a estudiar Derecho en San Petersburgo y también se acrecentó su vocación y pasión por el arte.
Trayectoria artística
Pretendió seguir la carrera de compositor, pero fue disuadido por el músico ruso Nikolái Rimski-Kórsakov. Pronto se unió a un círculo de escritores y pintores dirigido por Leon Bakst y Alexandre Veníos, que fundó y más tarde editó el progresista periódico de arte Mir Iskusstva (El Mundo del Arte, 1899-1904). En 1899 se convirtió en el asesor artístico de los Teatros Imperiales en Moscú y produjo varias óperas y ballets. Entre 1904 y 1908, organizó un gran número de exhibiciones en el extranjero.
En 1906 se estableció en París, donde contrató al célebre bajo Feodor Chaliapin para la producción en 1908 de su ópera Borís Godunov, de Músorgski.
Ballets Rusos
En 1909, en colaboración con el bailarín y coreógrafo ruso Mijaíl Fokin y un grupo de bailarines rusos entre los que se encontraban Váslav Nijinski, Anna Pavlova, Mijaíl Mordkin, Tamara Karsavina y Adolph Bolm, Diáguilev fundó los Ballets Rusos. La compañía hizo posible la realización de la idea que Fokin tenía sobre el ballet como un arte que unificaba la danza, el teatro, la música y la pintura; su impacto en el ballet del siglo XX es inestimable. Diáguilev ofreció una variedad extraordinaria de ballets, desde el romántico Giselle (1910), al ligero y surrealista Parada (1917) o La bella durmiente (1921), al lujoso estilo de la Rusia Imperial.
Diáguilev fue extraordinariamente eficaz en estimular las dotes creativas de las personas que trabajaban con él, y al reunir a los máximos talentos de su tiempo sirvió como catalizador de gran parte del arte y la música de su época.
Entre sus diseñadores escénicos, además de Bakst y Benois, estaban los artistas franceses Henri Matisse, Georges Braque y Maurice Utrillo, así como el diseñador y poeta Jean Cocteau (quien también escribió argumentos de ballet para Diáguilev) y Pablo Ruiz Picasso. Diáguilev encargó muchas partituras al compositor de origen ruso Ígor Stravinski, como El pájaro de fuego (1910), Petrushka (1911), La consagración de la primavera (1913), La boda (1923) y Apolo Musageta (1928). También encargó Dafnis y Cloe (1912) del francés Maurice Ravel, El sombrero de tres picos (1919) del español Manuel de Falla y obras de los franceses Darius Milhaud y Erik Satie.
Los coreógrafos más importantes del siglo XX que pasaron por su compañía eran de origen ruso como George Balanchine, Leonid Massine, Bronislava Nijinska y Serge Lifar.
Diáguilev era abiertamente homosexual. Tuvo relaciones (a menudo tempestuosas) con Serge Lifar, Leonid Massín, Antón Dolin, Borís Kojnó o Vaslav Nijinski (esta última fue la más conocida).
Muerte
Murió en el Grand Hotel des Bains de Mer del Lido de Venecia en 1929 siendo enterrado en las cercana isla de San Michele. Tres semanas después su hermanastro Valentín era ejecutado en el primer campo de concentración soviético.
Fuentes
- «Serguéi Diáguilev», artículo en la enciclopedia Wikipedia.
- Sergei Pavlovich Diaghilev
- Serguéi Pávlovich Diáguilev