José Peña Vilaboa
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José Peña Vilaboa. Destacado líder obrero y comunista. De oficio pintor, se vinculó desde muy temprano a los combates clasistas y participó activamente en huelgas, manifestaciones y otras acciones tendentes a lograr mejoras económicas, políticas y sociales para los trabajadores.
Sumario
Síntesis biográfica
Infancia y juventud
José Peña Vilaboa nació en La Habana en 1891. En 1914 asistió al Congreso Nacional Obrero, evento de fines politiqueros, en representación del Comité de Defensa del Barrio Arsenal. En septiembre de ese mismo año escribió su artículo "El Timo del Congreso", donde se analizó críticamente el carácter oficialista del evento y fustigó a quienes pretendieron utilizarlo para crear el Partido Beniocrático Social -de carácter reformista- y lograr así el apoyo de los obreros. Este partido se fundó, pero tuvo una efímera existencia. Peña Vilaboa fue miembro del Gremio de Pintores, Decoradores y Doradores desde que este se reorganizó en 1914. En el gremio se reveló como un verdadero dirigente sindical. Esto hizo que en febrero de 1915 fuera electo en la directiva con el cargo de tesorero, en 1917 como secretario y finalmente, presidente.
Muerte
En los últimos años de su vida trabajó llevando los libros de contabilidad del Memorándum Tipográfico, órgano de la Asociación de Tipógrafos. Debido a su prestigio y autoridad ante los trabajadores, fue designado junto a José Rego para reorganizar la FOH, después del asesinato de Alfredo López. En plena labor, luchando por llevar a los trabajadores las ideas marxista-leninistas, organizándolos e inculcándole el amor a la Revolución Socialista de Octubre, de la cual fue siempre un fiel defensor, murió a los 36 años de edad, el 13 de marzo de 1927, a consecuencia de la penosa enfermedad que lo aquejaba.
Logros, contribuciones o aportes importantes
Representó al gremio en todas las acciones comunes que realizaron los trabajadores por la unidad, y fue sobresaliendo hasta convertirse en un líder del movimiento obrero de Cuba. Fue miembro de comités de auxilio, inspirador de los comités conjuntos de colectividades obreras, comités de solidaridad y defensa y los comités circunstanciales, los cuales fueron organismos de transición que agrupaban a las uniones y sindicatos de trabajadores en defensa de sus intereses y que sirvieron para demostrar la urgente necesidad de lograr la unidad para obtener éxitos en la lucha. Socialista desde temprano, Peña Vilaboa fue elegido en 1918 secretario de la Agrupación Socialista de La Habana, donde también ocupó otras responsabilidades como las de vicepresidente. Dentro de esta organización libró, junto a otros marxistas, una gran batalla por la pureza de sus filas contra los elementos reformistas que había en su seno. En este sentido se pronunció en público a través de algunos artículos como "Lucha de Clases", aparecido en 1920, que estaba dirigido contra el Partido Socialista Radical.
Por sus actividades a favor de la clase obrera, se vio envuelto en procesos judiciales como los de 1919 y 1920, y el primero de carácter anticomunista realizado en Cuba, en septiembre de 1925. En el Congreso Obrero de 1920, tuvo una sobresaliente actividad: fue designado para redactar el manifiesto a los trabajadores sobre los acuerdos del evento y lo nombraron miembro de la Comisión Organizadora de la Federación Obrera de La Habana. Esta se fundó en octubre de 1921 y lo eligió su secretario general, cargo que se vio obligado a dejar en 1925 debido a grave enfermedad. Fue profesor de la Escuela Racionalista de la FOH y cuando por problemas de salud no pudo seguir como pintor, aprendió el oficio de linotipista.
Utilizaba la prensa para llevar a los trabajadores los mensajes de unidad, de la necesidad de la lucha de clases y la emancipación de la clase obrera. Fue director del periódico Anda, miembro del consejo de redacción del Memorándum Tipográfico; escribía la Nota Quincenal de Lucha de Clases; y colaboraba con otros periódicos como: Nueva Luz, Boletín del Cigarrero, entre otros. Algunos de sus artículos, declaraciones, etc, salieron publicados en la prensa burguesa.
Su firmeza y fidelidad a los principios marxista-leninistas se mostraron una vez más al tomar parte activa en la fundación de la Agrupación Comunista de La Habana, el 18 de marzo de 1923, en la que fue electo secretario general. En esta organización, demostró sus dotes de líder, y desplegó una fecunda labor. El reconocimiento a esta actitud lo evidenció el hecho de que al iniciarse el Primer Congreso Nacional de Agrupaciones Comunistas los compañeros de Vilaboa tomaron el acuerdo unánime de traerlo a las sesiones, ya que no podía valerse por sí mismo. Era delegado por derecho propio, por ser miembro de la directiva de la Agrupación de La Habana. En este congreso fue electo miembro del Comité Central, y el 18 de agosto de ese año, en la primera reunión de este organismo, fue propuesto por Mella para secretario general, lo que no aceptó por los problemas de enfermedad. Resultó entonces designado como secretario para la Atención del Movimiento Sindical.
A pesar de sus limitaciones físicas, era un hombre de acción, lo que demostró durante su vida y reafirmó al hacerse cargo de la dirección del Partido después de la expulsión de José Miguel Pérez y la embestida del gobierno de Machado contra los comunistas. Es por eso que en cumplimiento del acuerdo del congreso del primer Partido Comunista, ya sumido en la más absoluta clandestinidad, realizó el informe sobre la constitución del Partido, con el seudónimo de Lucas Cacheiro, en mayo de 1926. Ese mismo año convocó una reunión del Comité Central en la que propuso a Joaquín Valdés para que lo sustituyera como secretario general.
Fuentes
- El Militante Comunista. Agosto de 1985. Edición Especial.
- García García, Yaima. Trabajo Investigativo sobre José Peña Vilaboa. Octubre 2010.