Diferencia entre revisiones de «Judío Esenio»

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La guerra con Roma (66-70 d.C.) acabó con estas comunidades, donde los esenios fueron sometidos con todo instrumento de tortura siendo retorcidos, destrozados, quemados, etc. para blasfemar de su Legislador o comer alimentos prohibidos, sin adular a sus perseguidores, ni derramar lágrimas. Sonriendo en la agonía y perdonando a sus torturadores, exhalaron el alma con júbilo, pues confían que la recibirán nuevamente.
 
La guerra con Roma (66-70 d.C.) acabó con estas comunidades, donde los esenios fueron sometidos con todo instrumento de tortura siendo retorcidos, destrozados, quemados, etc. para blasfemar de su Legislador o comer alimentos prohibidos, sin adular a sus perseguidores, ni derramar lágrimas. Sonriendo en la agonía y perdonando a sus torturadores, exhalaron el alma con júbilo, pues confían que la recibirán nuevamente.
 
   
 
   
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Los sobrevivientes se habrán integrado en las distintas agrupaciones judeocristianas y judías. Algunos pueden haberse aliado con la iglesia de [[Jerusalén]], que huía también de las tropas romanas (cerca 70 d.C.), pero la secta como tal desapareció.
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Los sobrevivientes se habrán integrado en las distintas agrupaciones judeocristianas y judías. Algunos pueden haberse aliado con la iglesia de Jerusalén, que huía también de las tropas romanas (cerca 70 d.C.), pero la secta como tal desapareció.
 
 
 
==Membresía y Estructura==
 
==Membresía y Estructura==
 
   
 
   

Revisión del 12:36 25 jun 2013

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Esenios 001.jpeg
Secta judía, establecida probablemente a mediados del siglo II a.C., tras la revuelta macabea y cuya existencia hasta el siglo I está documentada por distintas fuentes. Comunidad de Esenios
Nombre latinoEseni-orum
TipoMonastica
ReglaSecta de la religión Judaica
FundadorMaestro de Justicia
Fundacióncerca del 150 a.C.
Lugar de fundaciónJudea
Desaparicióncerca del 70 d.C.
PresenciaPalestina
ActividadesBautismos, estudio del Antiguo Testamento
Personas destacadasMoisés, Hermes Trismegistos, Enoc

Los Esenios. Grupo de judíos sectarios que se apartaron de la corriente principal de la vida judía, florecieron cerca de 150 a.C. hasta 70 d.C.

Historicidad

Josefo los nombra, con los fariseos y los saduceos, como la tercera filosofía en el judaísmo del siglo I. Con él, Filón y Plinio (el Mayor) son los únicos historiadores contemporáneos que nos han dejado descripciones de las prácticas y creencias de las comunidades de los esenios, bastante diversas entre si.

Plinio el Viejo o el mayor, historiador romano, los ubicaba en el borde occidental del Mar Muerto, en el oasis de Engadi y en otras regiones de Asiria y Palestina, así como en el lago Maoris, en Egipto.

Evidencias

Pero el descubrimiento de los rollos que guardó una secta, que casi todos identificaban como esenia, en las cuevas de Qumran, ha permitido verificar los datos aportados por los historiadores.

Surgimiento

Existe varias teorias:

  • Surgen de los Hasideos, grupo de judio piadosos que apoyaron a los Macabeos en la guerra de independencia iniciada en el 167 a.C.
  • Surgen de un grupo de sacerdotes que en el 150 d.C. por su desagrado al sumo sacerdocio del macabeo Jonatan (perteneciente a una familia de sacerdotes que no eran descendientes de Aaron), se retiraron a Qumran.

Hechos

Evidencias de presencia de esenios en Qumran sobre el año 135 a.C.

El esenio Judas profetiza la muerte del macabeo-asmoneo Aristóbulo rey judio del 104 al 103 a.C.

Después de la guerra de los macabeos triunfo el separatismo (observancia estricta de la Ley Mosaica) entre los tres partidos: saduceos, fariseos y esenios. Estos últimos, antes del 76 a.C., rompieron con las demás y criticaron su laxitud.

El esenio Manaem tenia el don de prever el futuro, y cuando el joven Herodes hiba a la escuela, Manaem lo miró atentamente, y lo saludó dándole el título de Rey de los Judíos, lo cual se hizo realidad en el año 37 a.C., por lo que Herodes I El Grande sentía respeto por los esenios y los liberó del juramento de fidelidad que le impuso a la población. Protegidos por Herodes El Grande, realizaron campañas de misión y fundaron comunidades en casi todos los poblados de Judea.

Durante el reinado de Arquelao, hijo de Herodes i el Grande (4 a.C. al 6 d.C), un esenio llamado Menahem fue Jefe del Tribunal del Sanedrin renunciando y siendo sustituido por Shammai. Mientras, que otro esenio, llamado Simón interpreta el sueño de Arquelao sobre el fin de su reino.

Sus seguidores ascendieron a unos 4 000, pero los grupos individuales, que vivían por lo general en guetos o en las afueras de los pueblos no pasaban de 200 miembros.

La guerra con Roma (66-70 d.C.) acabó con estas comunidades, donde los esenios fueron sometidos con todo instrumento de tortura siendo retorcidos, destrozados, quemados, etc. para blasfemar de su Legislador o comer alimentos prohibidos, sin adular a sus perseguidores, ni derramar lágrimas. Sonriendo en la agonía y perdonando a sus torturadores, exhalaron el alma con júbilo, pues confían que la recibirán nuevamente.

Los sobrevivientes se habrán integrado en las distintas agrupaciones judeocristianas y judías. Algunos pueden haberse aliado con la iglesia de Jerusalén, que huía también de las tropas romanas (cerca 70 d.C.), pero la secta como tal desapareció.

Membresía y Estructura

Por tanto, para la admisión a la secta se requería un noviciado de dos o tres años, la renuncia a la propiedad privada, en muchos casos al matrimonio y un juramento de obediencia incondicional a los superiores.

Una vez aceptado, el nuevo miembro trabajaba en la agricultura, pastores, artes manuales como albañiles, carpinteros, tejedores, orfebres, etc., pero no se dedicaban al comercio, ni a fabricar armas.

Tenían un Consejo Supremo, constituido por tres sacerdotes y doce laicos, además de la presencia de levitas.

Se dedicaban al estudio de las escrituras y participaban en las discusiones comunitarias. Abluciones diarias y exámenes de conciencia garantizaban su pureza levítica. También estudiaban los secretos de las plantas y minerales con sus aplicaciones para beneficio humano, descubriendo sus maravillosos poderes curativos.

La secta conservó entre sus rangos las categorías de sacerdotes sadocitas y de levitas, para el futuro establecimiento de un culto digno en el templo purificado. Su calendario religioso discrepaba también del usado en Jerusalén.

No aceptaban ningún tipo de servidumbre por considerarla ilícita, pero para ser alguien en la comunidad era preciso soportar severas penitencias, un estricto ascetismo, no solo en el primer año de su iniciación, sino en los subsiguientes períodos, donde comenzaba a ser invitado a los ágapes o cenas íntimas.

El trato era de hermanos, y su vestimenta una túnica blanca, y sus calzados no eran de lujo. Son limpios

Se oraba de rodillas al estilo de Salomón, con el rostro en tierra, a la usanza de David, de Pie, como el pueblo en el Templo, y en los casos de súplica con las manos extendidas y elevadas como el Patriarca y con el rostro vuelto hacia el Santuario de Jerusalén.

No hacen daño a nadie ni por propia determinación ni bajo órdenes en caso de obtener autoridad no abusará de ella, será un amante de la verdad, mantendrá sus manos alejadas del robo y su alma pura de toda ganancia pecaminosa, no ocultará nada a los miembros de la comunidad, ni tampoco descubrirá ninguno de los secretos a los extraños, aun cuando sea torturado hasta la muerte.

Un administrador hace las compras y maneja el dinero.

Filosofía

Archivo:ElEvangelio de los Esenios.jpg
Libro “El Evangelio de los Esenios"

Los esenios se consideraban el pueblo escatológico de Dios, el de un nuevo pacto.

Los sectarios rehusaron reconocer a los sumos sacerdotes de Jerusalén por dos razones:

  • Estos no pertenecían a la legitima Casa de Sadoc, depuesta por Antíoco Epifanes.
  • Eran moralmente ineptos para su oficio sagrado.

A uno de ellos, un sacerdote real de los asmoneos, se le describe como el “sacerdote malvado” por excelencia, debido a la hostilidad que mostró al Maestro de Justicia y sus seguidores.

Toda interpretación bíblica la recibían del Maestro de Justicia, para ellos la última de los grandes iluminados, porque el sabía lo que otros profetas ignoraban: el momento final de la historia humana, el de la comunidad. Cuando esta expectación resultó frustrada, los sectarios se dispersaron.

Extremadamente escrupulosos, creían que su cumplimiento de la Ley traería la intervención divina, en forma de guerra, que pondría fin al mundo. Estos monjes esperaban que la pronta llegada de la nueva era pusiera fin a la presente “era de maldad”. Buscaban, mediante el estudio diligente y la practica de la Ley, merecer un favor divino y expiar los errores de los demás israelitas, pensaban que serian los ejecutantes del juicio divino en el momento final.

Como señal de los tiempos postreros, creían que surgirían tres figuras profetizadas en el Antiguo testamento:

  • el profeta semejante a Moisés (Dt 18:15): Comunicaría al pueblo de Dios la voluntad divina al fin de la era, como moisés lo había hecho al comienzo de su historia.
  • el Mesías Davídico: Seria un príncipe guerrero que conduciría las huestes fieles a Israel a una victoria aplastante sobre los “hijos de las tinieblas”, entre estos los principales serian las fuerzas de los gentiles de los Quitim (¿Romanos?)
  • Un sacerdote del linaje de Aarón: Seria el jefe de estado, superior al Mesías.

La comunidad practicaba una disciplina rigurosa e interpretaba la Ley aun más severa que los fariseos. Sus abluciones ceremoniales y comidas comunales, a las cuales la entrada se reglamentaba estrictamente, eran sus símbolos de su esperanza.

Su importancia

Archivo:Símbolodelos Esenios.jpg
Sómbolo de los Esenios

Los posibles puntos de contacto con el movimiento cristiano se han estudiado con esmero. Las semejanzas respecto a:

  • la escatología
  • la doctrina del remanente
  • la exégesis del Antiguo Testamento
  • las prácticas religiosas como el bautismo como rito de iniciación, el banquete sagrado con la bendición del pan y el vino.
  • No ofrecían sacrificios.

No obstante, existen diferencias esenciales:

  • El cristianismo no es esotérico, mientras que los esenios eran cerrados y exclusivos
  • El cristianismo no es asceta, mientras que los esenios practicaban la vida célibe.
  • El cristianismo acepta mujeres, menores de edad, pecadores, lisiados (ciegos, paralíticos, cojos, sordos, faltos de miembros), sin embargo los esenios no los aceptaban.

Referencias

  • Nuevo Diccionario Ilustrado de la Biblia. 1ra Impresión. Estados Unidos : Editorial Caribe. Inc. 1998. ISBN: 0-89922-285-4.