Diferencia entre revisiones de «Seguro de esclavos en Cuba»
(→Análisis de una Póliza Colectiva) (Etiqueta: revisar proyecto) |
(Etiqueta: revisar proyecto) |
||
Línea 126: | Línea 126: | ||
Presentando un complejo sistema de tablas por categorías para las indemnizaciones, donde clasificaba a los esclavos por sexo, constitución física, edad y labores que realizaban. | Presentando un complejo sistema de tablas por categorías para las indemnizaciones, donde clasificaba a los esclavos por sexo, constitución física, edad y labores que realizaban. | ||
− | [[Archivo:Cía_La_Protectora_Esclavos.JPG|thumb|180px|right|Frente de póliza]] | + | [[Archivo:Cía_La_Protectora_Esclavos.JPG|thumb|180px|right|Fragmento del Frente de una póliza]] |
− | En la póliza individual No. 17231 emitida el [[1 de agosto]] de [[1857]] el señor M. Cano y Vega, propietario de la finca Desengaño, La Habana, asegura por cuatro años un esclavo de su propiedad valorado en 500 pesos. En la propia póliza se describen las señas del mismo como si se tratase de un animal más de su propiedad:{{sistema:cita|''Negro criollo de color prieto, con ojos negros, pasas, nariz chata, constitución robusta, y 10 años de edad, llamado Pedro, empleado en actividades de Batey, que lo sitúan en la quinta categoría''.<ref>[http://www.todocoleccion.net/documentos-antiguos/esclavos-ano-1857-cuba-espana-colonial-poliza-sobre-vida-un-esclavo~x37620653&sa Esclavos. Año 1857, Cuba (España colonial). Póliza sobre la vida de un esclavo.] Consultado: 28 de noviembre de 2016.</ref>}} | + | En la póliza individual No. 17231 emitida el [[1 de agosto]] de [[1857]] el señor M. Cano y Vega, propietario de la finca Desengaño, en La Habana, asegura por cuatro años un esclavo de su propiedad valorado en 500 pesos. En la propia póliza se describen las señas del mismo como si se tratase de un animal más de su propiedad:{{sistema:cita|''Negro criollo de color prieto, con ojos negros, pasas, nariz chata, constitución robusta, y 10 años de edad, llamado Pedro, empleado en actividades de Batey, que lo sitúan en la quinta categoría''.<ref>[http://www.todocoleccion.net/documentos-antiguos/esclavos-ano-1857-cuba-espana-colonial-poliza-sobre-vida-un-esclavo~x37620653&sa Esclavos. Año 1857, Cuba (España colonial). Póliza sobre la vida de un esclavo.] Consultado: 28 de noviembre de 2016.</ref>}} |
Y finalmente, que por la pérdida total o parcial superior a lo estipulado, la aseguradora indemnizaría al asegurado, hasta en 400 pesos, una vez hecha las correspondientes deducciones. | Y finalmente, que por la pérdida total o parcial superior a lo estipulado, la aseguradora indemnizaría al asegurado, hasta en 400 pesos, una vez hecha las correspondientes deducciones. | ||
Línea 141: | Línea 141: | ||
==Análisis de una Póliza Colectiva== | ==Análisis de una Póliza Colectiva== | ||
[[Archivo:Póliza_Colec_La_Protectora_01.jpg|thumb|180px|left|]] | [[Archivo:Póliza_Colec_La_Protectora_01.jpg|thumb|180px|left|]] | ||
− | A través del documento mostrado, los señores Lavalle y Cía. domiciliados en calle Cuba No.148 en La Habana. Solicitan una póliza por 4 años para una dotación de 31 negras esclavas ubicadas en el Ingenio San Miguel ubicado en Macuriges (actual [[Pedro Betancourt (municipio)|municipio Pedro Betancourt]], [[Matanzas]]) en el año de 185? Denominado Acta de Adhesión<ref> | + | A través del documento mostrado, los señores Lavalle y Cía. domiciliados en calle Cuba No.148 en La Habana. Solicitan una póliza por 4 años para una dotación de 31 negras esclavas ubicadas en el Ingenio San Miguel, ubicado en Macuriges (actual [[Pedro Betancourt (municipio)|municipio Pedro Betancourt]], [[Matanzas]]) en el año de 185? Denominado Acta de Adhesión<ref>Foto cortesía de la señora Ana Sojo Gil, Directora del Museo del Seguro del Instituto de Ciencias del Seguro. Fundación MAPFRE, España.</ref> (Pliego de 52 x 33 cm) al reverso del mismo se encuentra el listado de las esclavas amparadas por el seguro. Parece que en realidad este documento era un resumen, pues se le asignaba un número de póliza a cada esclava. |
Presenta una nota manuscrita en el margen izquierdo:''La compañía no responde de los riesgos del parto ni de sus consecuencias por esta sola vez.'' (Seguramente se refiere al caso de Ma. Antonia que estaba preñada al momento del análisis del riesgo). | Presenta una nota manuscrita en el margen izquierdo:''La compañía no responde de los riesgos del parto ni de sus consecuencias por esta sola vez.'' (Seguramente se refiere al caso de Ma. Antonia que estaba preñada al momento del análisis del riesgo). | ||
Línea 232: | Línea 232: | ||
|- | |- | ||
|8 | |8 | ||
− | |Ma. | + | |Ma. Antonia. |
|Gangá. | |Gangá. | ||
|2? | |2? | ||
Línea 481: | Línea 481: | ||
Lo visto en este análisis de riesgo no confirma la tesis planteada en alguna literatura de que los esclavos eran marcados al [[fuego]], pues de haberlo estado, seguramente el asegurador habría hecho referencia a este hecho como otra característica identificativa significativa como las marcas que tenían en la [[cara]], representativa de adornos religiosos según sus respectivas naciones. Tal vez no era costumbre generalizada de todos los esclavistas, el marcado con fuego, o tal vez solo se usaba como castigo, por lo que estos esclavos marcados tal vez resultasen como no asegurables dado su mayor riesgo de pérdida para el asegurador. | Lo visto en este análisis de riesgo no confirma la tesis planteada en alguna literatura de que los esclavos eran marcados al [[fuego]], pues de haberlo estado, seguramente el asegurador habría hecho referencia a este hecho como otra característica identificativa significativa como las marcas que tenían en la [[cara]], representativa de adornos religiosos según sus respectivas naciones. Tal vez no era costumbre generalizada de todos los esclavistas, el marcado con fuego, o tal vez solo se usaba como castigo, por lo que estos esclavos marcados tal vez resultasen como no asegurables dado su mayor riesgo de pérdida para el asegurador. | ||
− | Al analizar las Tablas por edades asegurables de las dos compañías se aprecia que la primera aseguraba hasta los 65 años de edad y la segunda hasta los 70, lo que nos dice que los esclavos vivían hasta esas avanzadas edades en activo y con valor asegurable para sus respectivos dueños. De no ser así las mencionadas tablas no recogerían edades tan avanzadas, claro que estas tablas incluían una depreciación tanto del valor asegurado como del valor indemnizable por la edad, además del lógico aplicado por la labor que desempeñaban, que dicho sea de paso, no era igual para las dos compañías, pues la primera los clasificaba en siete categorías y la otra en cinco. | + | Al analizar las [[Tablas de mortalidad para el seguro en Cuba|Tablas]] por edades asegurables de las dos compañías se aprecia que la primera aseguraba hasta los 65 años de edad y la segunda hasta los 70, lo que nos dice que los esclavos vivían hasta esas avanzadas edades en activo y con valor asegurable para sus respectivos dueños. De no ser así las mencionadas tablas no recogerían edades tan avanzadas, claro que estas tablas incluían una depreciación tanto del valor asegurado como del valor indemnizable por la edad, además del lógico aplicado por la labor que desempeñaban, que dicho sea de paso, no era igual para las dos compañías, pues la primera los clasificaba en siete categorías y la otra en cinco. |
− | Necesario es aclarar, que las compañías de seguros que vendían pólizas sobre la vida de los esclavos, no eran compañías de seguros de vida, esto se puede entender mejor cuando se analiza su ejecutoria: | + | Necesario es aclarar, que las compañías de seguros que vendían pólizas sobre la vida de los esclavos, no eran compañías de [[Seguros de vida en Cuba|seguros de vida]], esto se puede entender mejor cuando se analiza su ejecutoria: |
* El interés asegurable se basaba en el derecho de propiedad del esclavista sobre el esclavo, el asegurado era el dueño. | * El interés asegurable se basaba en el derecho de propiedad del esclavista sobre el esclavo, el asegurado era el dueño. | ||
* Los esclavos no podían ser sujetos de seguro, ni siquiera conocían la existencia del contrato y mucho menos modificarlo. En realidad eran el objeto de seguro, como cualquier otra posesión material. | * Los esclavos no podían ser sujetos de seguro, ni siquiera conocían la existencia del contrato y mucho menos modificarlo. En realidad eran el objeto de seguro, como cualquier otra posesión material. | ||
Línea 491: | Línea 491: | ||
El [[10 de octubre]] de [[1868]] [[Carlos Manuel de Céspedes]] libertó sus esclavos, comenzando así la [[Guerra de los Diez Años]], lamentablemente no se lograron sus objetivos libertarios y emancipadores, por lo que continuó la esclavitud en Cuba. | El [[10 de octubre]] de [[1868]] [[Carlos Manuel de Céspedes]] libertó sus esclavos, comenzando así la [[Guerra de los Diez Años]], lamentablemente no se lograron sus objetivos libertarios y emancipadores, por lo que continuó la esclavitud en Cuba. | ||
− | Entonces, cuándo dejaron de existir las compañías de Seguros sobre la Vida de los | + | Entonces, cuándo dejaron de existir las compañías de Seguros sobre la Vida de los Esclavos, seguramente, cuando ya no fueron necesarias, es decir, al terminar la esclavitud, que para el caso específico de Cuba fue en [[1886]]. |
Fue un proceso que duró varios años, a partir de la Ley del ''“Patronato”'' el cual fue programado para ocho años, pero que en la práctica duró solo seis. Si se sabe además que la póliza corriente cubría por un período de cuatro años, entonces no debió existir aseguradora alguna de esta línea de seguros más allá de [[1882]] pues ya era más que evidente su inutilidad práctica, y no podía mantenerse un estatus de legalidad para las aseguradoras en tales circunstancias. | Fue un proceso que duró varios años, a partir de la Ley del ''“Patronato”'' el cual fue programado para ocho años, pero que en la práctica duró solo seis. Si se sabe además que la póliza corriente cubría por un período de cuatro años, entonces no debió existir aseguradora alguna de esta línea de seguros más allá de [[1882]] pues ya era más que evidente su inutilidad práctica, y no podía mantenerse un estatus de legalidad para las aseguradoras en tales circunstancias. | ||
Línea 519: | Línea 519: | ||
==Bibliografía== | ==Bibliografía== | ||
<div style="-moz-column-count:2; column-count:2;"> | <div style="-moz-column-count:2; column-count:2;"> | ||
− | *Cruz Pasos, Rosell.: ''[[Seguros y Administración de Riesgos en Cuba|Seguros y administración de riesgos en Cuba]]''. EAE, OmniScriptum Gmbh & Co. KG Saabrücken, Alemania 2013. ISBN: 978-3-959-07558-2. | + | *[[Rosell Cruz Pasos|Cruz Pasos, Rosell]].: ''[[Seguros y Administración de Riesgos en Cuba|Seguros y administración de riesgos en Cuba]]''. EAE, OmniScriptum Gmbh & Co. KG Saabrücken, Alemania 2013. ISBN: 978-3-959-07558-2. |
*Cruz Pasos, Rosell. ''[[Hitos del Seguro en Cuba]]''. EAE, OmniScriptum Gmbh & Co. KG Saabrücken, Alemania. 2016, ISBN: 978-3-639-78118-2. | *Cruz Pasos, Rosell. ''[[Hitos del Seguro en Cuba]]''. EAE, OmniScriptum Gmbh & Co. KG Saabrücken, Alemania. 2016, ISBN: 978-3-639-78118-2. | ||
*Erénchum Medrano, Félix.: [http://babel.hathitrust.org/cgi/pt?id=hvd.hnkd2a;view=1up;seq=7 Anales de la Isla de Cuba]. Diccionario Administrativo, Económico, Estadístico y Legislativo. Año 1855 (A-B) Imprenta del Tiempo, calle Cuba Nº 110. La Habana 1856. Harvard College Library, Collection on Cuba. | *Erénchum Medrano, Félix.: [http://babel.hathitrust.org/cgi/pt?id=hvd.hnkd2a;view=1up;seq=7 Anales de la Isla de Cuba]. Diccionario Administrativo, Económico, Estadístico y Legislativo. Año 1855 (A-B) Imprenta del Tiempo, calle Cuba Nº 110. La Habana 1856. Harvard College Library, Collection on Cuba. | ||
Línea 526: | Línea 526: | ||
*Guerra Sánchez, Ramiro; José M. Pérez Cabrera; Juan J. Ramos y Emeterio S. Santovenia.: Historia de la Nación Cubana. Editorial de la Nación Cubana, S. A. 10 tomos. La Habana 1952. | *Guerra Sánchez, Ramiro; José M. Pérez Cabrera; Juan J. Ramos y Emeterio S. Santovenia.: Historia de la Nación Cubana. Editorial de la Nación Cubana, S. A. 10 tomos. La Habana 1952. | ||
*Jenks, Leland H.: Nuestra Colonia de Cuba. Editorial Palestra. Buenos Aires 1930. Primera reimpresión, La Habana, Cuba 1959. | *Jenks, Leland H.: Nuestra Colonia de Cuba. Editorial Palestra. Buenos Aires 1930. Primera reimpresión, La Habana, Cuba 1959. | ||
+ | *Sojo Gil, Ana: Museo del seguro. Fundación MAPFRE, Madrid 2010. ISBN: 978-84-9844-209-0. | ||
*Tablada, Carlos y Galia Castelló.: La Historia de la Banca en Cuba. Del siglo XIX al XXI. Tomo I La Colonia. 2da edición. Editorial Ciencias Sociales, La Habana 2007. ISBN: 978-959-06-1029-5. | *Tablada, Carlos y Galia Castelló.: La Historia de la Banca en Cuba. Del siglo XIX al XXI. Tomo I La Colonia. 2da edición. Editorial Ciencias Sociales, La Habana 2007. ISBN: 978-959-06-1029-5. | ||
</div> | </div> | ||
[[category:Seguros]] | [[category:Seguros]] |
Revisión del 10:33 14 oct 2016
|
Seguros de esclavos en Cuba. Los esclavos[1] fueron la fuerza productiva de la sociedad esclavista, por lo que les eran intrínsecamente imprescindibles, de ahí que dedicasen tantos recursos financieros en su adquisición, por lo que protegerse ante la posible pérdida de esos recursos resultase una tarea prioritaria. Debido a lo anterior surgieron y se desarrollaron sociedades aseguradoras especializadas en este segmento del mercado; las Sociedades Mutuas de Seguros sobre la Vida de los Esclavos, que no obstante su sugerente nombre, no ofertaban seguros de vida precisamente, pues a los esclavos se les tenía por animales y como tales eran asegurados.
La esclavitud no era una actividad de bajo costo como suele pensarse, más bien todo lo contrario, comprar esclavos era costoso pues requería de 20 a 30 salarios de la época, lo que hoy serían unos cuatro a seis mil pesos. Además estaba el gasto para mantenerlos activos, y el impuestos que había que pagar por adquirirlos. Por eso los aseguraban como las otras posesiones materiales como forma de proteger lo invertido en ellos.
Sumario
Historia
El 15 de agosto de 1511 comenzó la colonización de Cuba al ser fundada la villa de Baracoa por Diego Velázquez Cuellar. En 1514 según una estimación realizada por el padre Bartolomé de las Casas y Pánfilo de Narváez en viaje por la Isla, calcularon en unos doscientos mil indios los habitantes nativos existentes. Ya en el año 1523 y debido a la escasez de fuerza de trabajo pues los indios habían sido virtualmente exterminados, se introduce al país el primer lote de 500 esclavos desde África, para atender labores agrícolas principalmente, aunque desde antes ya se tenían algunos esclavos llevados de la Española a Santiago de Cuba, por eso cuando Hernán Cortés parte hacia México en 1518 lleva algunos consigo.
La sociedad cubana de los siglos XVI – XIX aceptaban como una práctica normal la existencia de esclavos para realizar labores domésticas, agrícolas, mineras, etc. Por lo que no se tenía el más mínimo remordimiento por lo que hacían, aunque desde muy temprano hubo voces que se adelantaron a su tiempo y se atrevieron a proclamar lo aberrante de aquella práctica. En América se erigen algunas voces contra ese mal trato dado a los indígenas, como el caso de fray Antonio de Montesinos, con sus discursos, y fray Bartolomé de las Casas, que llegó a recabar la atención del Rey Carlos V. Hubo que esperar, no obstante, que ocurriera la revolución industrial de la máquina de vapor, mucha resistencia por parte de los propietarios de aquellos, así como las condiciones adecuadas para que se pudiesen cumplir los tratados internacionales sobre la abolición de la esclavitud en Cuba, para que finalmente se terminase aquella práctica inhumana de comprar y vender personas.
En 1807 la Cámara de los Comunes aprueba el fin de la esclavitud en las Antillas, con el fin de perjudicar el desarrollo de la industria azucarera española en sus colonias, legalizando el ataque a los barcos negreros españoles, así como estimular la venta de sus máquinas de vapor que sustituirían la fuerza de trabajo esclava en el desarrollo histórico de la sociedad. Presionado por Inglaterra, Fernando VII se vio obligado a prohibir la trata negrera en Cuba el año 1817, aunque esta medida nunca se cumplió.
El 17 de febrero de 1880 fue aprobada la Ley del Patronato que preveía la eliminación de la esclavitud en un término de ocho años, el 7 de octubre de 1886 se suspendió el patronato y culminó la esclavitud en Cuba.
Durante casi dos siglos no hubo compañías cubanas de seguros que prestasen esta cobertura, por lo que en aquellos primeros tiempos lo que se aseguraba era el traslado de los esclavos, es decir solo se protegían los traficantes negreros al asegurar el costo del Flete involucrado en el contrato. A través de un contrato se afianzaba el negocio otorgado al asentista para la introducción de negros al país, que le otorgaba a una persona el derecho para que cumpliese con la encomienda de introducir Bozales al país.
Como ejemplo de lo anterior está el Asiento[2] otorgado a Miguel de Uriarte el 14 de junio de 1765 para introducir de 500 a 600 esclavos anuales por un término de 10 años correspondiendo a La Habana un total de 1000 durante el período previsto.
El cumplimiento de este contrato fue afianzado[3] por José María Enrile, por sí y como apoderado de Uriarte, José Ortuño Ramírez, Marqués de Villareal de Purillona, Lorenzo de Aristegui y Francisco de Aguirre, los cuales formaban un típico grupo de intereses Vascos, tan propios del comercio español del siglo XVIII. Esos afianzadores en el mes de octubre del mismo año del asiento se hicieron cargo de la contrata formándose entonces la Sociedad Aguirre, Aristegui y Cía. Esta contrata, que figura en algunas obras como del Marqués de Casa Enrique, introdujo en Cuba unos 14 000 esclavos entre 1773 y 1779[4]
Estos contratos no solo se le otorgaban a nacionales, como ejemplo de ello están los concedidos a la Real Compañía Francesa de Guinea, a principios del siglo XVIII, y a la Compañía del Mar del Sur, británica, posteriormente. A Cuba llegaron esclavos de muchas naciones o regiones de África lo que corrobora que a la Isla entraron traídos por ingleses, franceses y españoles, ya que cada imperio tenía sus zonas de comercio en aquel continente. Lo que se conoce como Comercio Triangular de Esclavos de la costa noroccidental de África por las potencias europeas hacia las Antillas.
Debido a la introducción de negros en la Isla, la población fue incrementándose a través de los años, como se aprecia en la siguiente tabla, de 1792 hasta 1849 la población de blancos estuvo en desventaja numéricamente. La metrópolis se preocupó del asunto e hizo planes de incrementar la población de blancos, pero tal propósito nunca llegó a materializarse por falta de recursos, aunque se introdujeron centenares de familias españolas en diferentes regiones de la Isla.
Años | Blancos | Esclavos | Libres | Relación B:N | Total |
---|---|---|---|---|---|
1774 | 96440 | 44333 | 30847 | 1,28 blanco / negro | 171620 |
1792 | 126559 | 84590 | 54852 | 0,91 blanco / negro | 266001 |
1817 | 259830 | 199145 | 92058 | 0,89 blanco / negro | 551033 |
1827 | 311051 | 286942 | 106494 | 0,79 blanco / negro | 704487 |
1841 | 418291 | 436495 | 152838 | 0,71 blanco / negro | 1007624 |
1846 | 425767 | 323731 | 149226 | 0,90 blanco / negro | 898724 |
1849 | 457133 | 323897 | 164412 | 0,94 blanco / negro | 945442 |
1860 | 604612 | 367370 | 207733 | 1,05 blanco / negro | 1179715 |
Fuente: Ramón de la Sagra. Cuba en 1860. p.9
La Providencia
En el año 1833 se funda la Compañía General Cubana de Seguros Mutuos sobre la vida y valores de los esclavos[5] La Providencia. Para dar cobertura al activo más importante de la clase esclavista, por un período de 50 años para:El 6 de julio de 1854 Don Miguel Embil eleva a las autorizadas, una solicitud con los informes favorables de la Real Junta de Fomento, el Alcalde Mayor, el Tribunal Mercantil y el Real Acuerdo para refundar la compañía y hacerse cargo de la misma, el día 23 de agosto de 1855 le es aprobada su solicitud por el Capitán General. Comenzando sus operaciones el día 30 de septiembre del propio año después de haber alcanzado los dos millones exigidos en nuevas adhesiones[7].
Se indemnizaba la muerte y las incapacidades permanentes por cualquier causa, excepto el suicidio y la sevicia. El seguro se hacía por cinco años y la dirección podía aprobarlo por un tiempo menor. La compañía aseguraba toda clase de esclavos en poblado o en el campo que no pasen de 65 años ni tengan menos de uno. No aseguraban los esclavos que al presentarse a seguro se hallen enfermos de peligro o padezcan males crónicos que amenacen serlo. La compañía tenía su propio médico para inspeccionar los esclavos antes de asegurarlos.
No aseguraban discapacitados ni los esclavos que al presentarse a seguro se hallen enfermos de peligro o padezcan males crónicos que amenacen serlo. Solo se autorizaba un máximo de prima de 30.000 pesos en cada finca o dotación y un valor asegurado que no pasara de dos millones de pesos. Esto último estaba estatuido, generalmente para evitar que en los inicios de las operaciones cayeran en una situación de quiebra, estaba condicionado a que se fueran creando reservas financieras con las que se pudiera hacer frente a tal situación, después de lo cual se podía ir incrementando el número de piezas asegurables en una misma locación.
A la hora de asegurar los esclavos eran clasificados según los diferentes grados de peligro a que se hallan expuestos en razón de la clase de trabajos a que están destinados, el señor Colomé dice al respecto:
La Protectora
El 20 de noviembre de 1855 se establece la Compañía General Cubana de Seguros Mutuos sobra la vida de los esclavos, La Protectora, entre los propietarios de esclavos que se han adherido o puedan en lo sucesivo adherirse a los presentes estatutos para indemnizar los casos de muerte e inutilizaciones que les sobrevengan por efecto de enfermedad o por otra cualquiera causa imprevista y fortuita, excepto el suicidio o los resultados de la sevicia (Art.1). Se aseguran esclavos de ambos sexos, en la ciudad o el campo de 1-70 años de edad (Art.8). Al inicio no podrá asegurar más de 500 esclavos por dotación (Art.14). Autorizada por un período de treinta años (Art.6). Se consideraría constituida al lograr asegurar cinco mil esclavos (Art.7). El seguro se hará por 4-8 años (Art.24). El ejercicio social de la compañía comienza el día que se constituya (Art.25) cosa que ocurrió el 28 de febrero de 1856.
Presentando un complejo sistema de tablas por categorías para las indemnizaciones, donde clasificaba a los esclavos por sexo, constitución física, edad y labores que realizaban.
En la póliza individual No. 17231 emitida el 1 de agosto de 1857 el señor M. Cano y Vega, propietario de la finca Desengaño, en La Habana, asegura por cuatro años un esclavo de su propiedad valorado en 500 pesos. En la propia póliza se describen las señas del mismo como si se tratase de un animal más de su propiedad:Y finalmente, que por la pérdida total o parcial superior a lo estipulado, la aseguradora indemnizaría al asegurado, hasta en 400 pesos, una vez hecha las correspondientes deducciones.
El 7 de febrero de 1858 la compañía resultó reformada, y es emitida la Orden que aprobaba la reforma de sus estatutos[9]
En caso de fallecimiento de algún esclavo, el asegurado debía pedir la intervención de un juez de paz o del capitán pedáneo en caso de no existir el primero, en las poblaciones en que había un representante permanente de la aseguradora, éste podía ocuparse los trámites indemnizatorios. El objetivo era que un tercero certificase la causa de la muerte, así como su inclusión en la póliza.
El 6 de diciembre de 1856 el gobierno superior civil tuvo que emitir una orden mandando a los jueces pedáneos, que reciban las declaraciones de siniestros de esclavos, y que den atestados de ellas según se expresa en los estatutos de la compañía a todos los interesados porque hubo jueces que no quisieron hacerlo.
Por Real Cédula del 25 de enero de 1780 se autorizó a los colonos cubanos la compra de esclavos en las colonias francesas, pero no dio buenos resultados. Por eso en 1786 la contrata que existía, limitada solo a la metrópolis, con la Casa Baker & Dawson de Liverpool, fue ampliada para que pudiese exportar esclavos a Caracas y La Habana.
Análisis de una Póliza Colectiva
A través del documento mostrado, los señores Lavalle y Cía. domiciliados en calle Cuba No.148 en La Habana. Solicitan una póliza por 4 años para una dotación de 31 negras esclavas ubicadas en el Ingenio San Miguel, ubicado en Macuriges (actual municipio Pedro Betancourt, Matanzas) en el año de 185? Denominado Acta de Adhesión[10] (Pliego de 52 x 33 cm) al reverso del mismo se encuentra el listado de las esclavas amparadas por el seguro. Parece que en realidad este documento era un resumen, pues se le asignaba un número de póliza a cada esclava.
Presenta una nota manuscrita en el margen izquierdo:La compañía no responde de los riesgos del parto ni de sus consecuencias por esta sola vez. (Seguramente se refiere al caso de Ma. Antonia que estaba preñada al momento del análisis del riesgo).
En observaciones: Se anotan diferentes características identificativas de varias de las esclavas; Encarnación rayas en las sienes; La negra… Conga picada de viruela; La Ma. Antonia, Gangá, está preñada; La negra Paula, Lucumí, tiene la cara rayada; La Mariana también tiene la cara rayada; Cristina, Gangá, tiene dos criollitos; La negra Caridad, Lucumí, tiene rayas entre sienes; Lorenza, Lucumí, tiene rayas en la cara; La negra Magdalena tiene también rayas en la cara; Josefa, Conga, rayada la cara; La negra Blanca picada de viruela; La Rita también picada de viruela; La negra Belén con marcas en las sienes.
Le sigue una valoración general que dice: de las 31 negras insertas al reverso 19 son excelentes, las 12 restantes aunque no del todo iguales a las anteriores son muy buenas negras de campo y muy sanas. Al reverso la siguiente tabla con los datos de las esclavas:
No. | Nombre | Nación | Edad | Talla | Constitución | Categoría | Valor Aseg | Indemnizable |
---|---|---|---|---|---|---|---|---|
1 | Encarnación | Carabalí | 36 | 5,2 | Robusta | 3ra | 500 | 428 |
2 | Luz | Gangá | 22 | 5,2 | Robusta | 3ra | 520 | 462 |
3 | Petrona | Criolla | 2? | 6,1 | Robusta | 5ta | 800 | 550 |
4 | Surama | Conga | 3? | 5,6 | Robusta | 3ra | 594 | 524 |
5 | Craquina. | Gangá. | 2? | 5,6 | Robusta. | 5ta. | 750 | 530 |
6 | Nareisa. | Carabalí. | 3? | 5,4 | Robusta. | 5ta. | 900 | 750 |
7 | Teresa. | Gangá. | 46 | 5,6 | Robusta. | 5ta. | 700 | 580 |
8 | Ma. Antonia. | Gangá. | 2? | 5,5 | Robusta. | 5ta. | 900 | 750 |
9 | Paula. | Lucumí. | 26 | 5,1 | Robusta. | 5ta. | 800 | 550 |
10 | Marina. | Lucumí. | 2? | 5,8 | Robusta. | 5ta. | 800 | 550 |
11 | María. | Conga. | 24 | 5,6 | Robusta. | 5ta. | 750 | 530 |
12 | Cristina. | Gangá. | 32 | 5,8 | Robusta. | 5ta. | 900 | 750 |
13 | Cacilda. | Lucumí. | 24 | 5,9 | Robusta. | 5ta. | 750 | 530 |
14 | Lugarda. | Gangá. | 21 | 5,7 | Robusta. | 5ta. | 750 | 530 |
15 | (ilegible) | Conga. | 1? | 5,5 | Robusta. | 3ra. | 450 | 375 |
16 | Javiera. | Carabalí. | 40 | 5,6 | Endeble. | 4ta. | 397 | 322 |
17 | Úrsula. | Carabalí. | 34 | 5,6 | Robusta. | 5ta. | 900 | 750 |
18 | Lorenza. | Lucumí. | 30 | 5,2 | Robusta. | 5ta. | 900 | 750 |
19 | Magdalena. | Conga. | 30 | 5,4 | Robusta. | 5ta. | 900 | 750 |
20 | Manuela. | Gangá. | 30 | 5,6 | Robusta. | 5ta. | 900 | 750 |
21 | Josefa. | Conga. | 21 | 5,3 | Robusta. | 5ta. | 750 | 530 |
22 | Águeda. | Criolla. | 2? | 5,11 | Robusta. | 3ra. | 588 | 515 |
23 | Manuela. | Gangá. | 2? | 5,2 | Robusta. | 3ra. | 550 | 475 |
24 | Blanca. | Gangá. | 5? | 5,7 | Robusta. | 3ra. | 594 | 524 |
25 | Rita. | Criolla. | 5? | 5,8 | Robusta. | 3ra. | 530 | 455 |
26 | Enriqueta. | Conga. | 2? | 5,6 | Robusta. | 5ta. | 750 | 530 |
27 | Belén. | Carabalí. | 4? | 5,2 | Robusta. | 5ta. | 440 | 378 |
28 | Guadalupe. | Carabalí. | ?? | 5,7 | Robusta. | 5ta. | 440 | 378 |
29 | Rosa. | Conga. | 2? | 5,5 | Endeble. | 4ta. | 520 | 445 |
30 | Luisa. | Gangá. | 26 | 5,7 | Robusta. | 5ta. | 800 | 550 |
31 | Lucía. | Gangá. | 48 | 5,5 | Endeble. | 1ra. | 500 | 480 |
(?) Representa un carácter ilegible.
Como puede apreciarse, veintiocho eran Bozales, por nación[11]: seis eran Carabalí, siete eran Conga, once eran Gangá y cuatro eran Lucumí. Las otras tres eran criollas. Mientras que por edades se comportaba de la siguiente manera: una entre 10-19 años; quince entre 20-29; ocho entre 30-39; cuatro entre 40-49 y dos entre 50-59.
También incluían otras señas particulares identificativas de las esclavas, como el color de la piel y los ojos, el tipo de pelo, nariz y barba. Todo ello con el objetivo de poder identificarlas correctamente en caso de muerte y evitar de esa forma la posible mala fe del asegurado, cosa que al parecer era frecuente en la época.
Este documento no es la póliza de seguros, aunque si formaba parte importante del contrato, ellos lo llamaban Acta de Adhesión viene siendo el equivalente actual de la a la Solicitud del Contrato, donde si incluía la relación de objetos asegurados así como la evaluación del riesgo.
Lo visto en este análisis de riesgo no confirma la tesis planteada en alguna literatura de que los esclavos eran marcados al fuego, pues de haberlo estado, seguramente el asegurador habría hecho referencia a este hecho como otra característica identificativa significativa como las marcas que tenían en la cara, representativa de adornos religiosos según sus respectivas naciones. Tal vez no era costumbre generalizada de todos los esclavistas, el marcado con fuego, o tal vez solo se usaba como castigo, por lo que estos esclavos marcados tal vez resultasen como no asegurables dado su mayor riesgo de pérdida para el asegurador.
Al analizar las Tablas por edades asegurables de las dos compañías se aprecia que la primera aseguraba hasta los 65 años de edad y la segunda hasta los 70, lo que nos dice que los esclavos vivían hasta esas avanzadas edades en activo y con valor asegurable para sus respectivos dueños. De no ser así las mencionadas tablas no recogerían edades tan avanzadas, claro que estas tablas incluían una depreciación tanto del valor asegurado como del valor indemnizable por la edad, además del lógico aplicado por la labor que desempeñaban, que dicho sea de paso, no era igual para las dos compañías, pues la primera los clasificaba en siete categorías y la otra en cinco.
Necesario es aclarar, que las compañías de seguros que vendían pólizas sobre la vida de los esclavos, no eran compañías de seguros de vida, esto se puede entender mejor cuando se analiza su ejecutoria:
- El interés asegurable se basaba en el derecho de propiedad del esclavista sobre el esclavo, el asegurado era el dueño.
- Los esclavos no podían ser sujetos de seguro, ni siquiera conocían la existencia del contrato y mucho menos modificarlo. En realidad eran el objeto de seguro, como cualquier otra posesión material.
- Tenían un valor, el cual estaba fijado por su precio en plaza, al contrario de los seguros de vida donde se pacta un valor entre las partes, dada la
- El asegurado recibía una indemnización en vez de la consabida compensación aplicable en los seguros de vida, y una vez aceptada, la aseguradora podía subrogarse en grado y lugar del asegurado. Acto ilegal en los seguros de vida modernos. imposibilidad de justipreciar la vida humana.
El 10 de octubre de 1868 Carlos Manuel de Céspedes libertó sus esclavos, comenzando así la Guerra de los Diez Años, lamentablemente no se lograron sus objetivos libertarios y emancipadores, por lo que continuó la esclavitud en Cuba.
Entonces, cuándo dejaron de existir las compañías de Seguros sobre la Vida de los Esclavos, seguramente, cuando ya no fueron necesarias, es decir, al terminar la esclavitud, que para el caso específico de Cuba fue en 1886.
Fue un proceso que duró varios años, a partir de la Ley del “Patronato” el cual fue programado para ocho años, pero que en la práctica duró solo seis. Si se sabe además que la póliza corriente cubría por un período de cuatro años, entonces no debió existir aseguradora alguna de esta línea de seguros más allá de 1882 pues ya era más que evidente su inutilidad práctica, y no podía mantenerse un estatus de legalidad para las aseguradoras en tales circunstancias.
"Lo más triste de la esclavitud no fueron los horrores y barbaries cometidos antes del siglo XX, sino, el hecho cierto de que todavía hoy persisten claras manifestaciones de ésta, en no pocos lugares del mundo ¿civilizado?" |
Notas y referencias
- ↑ Esclavo: Persona privada de todas sus libertades y derechos, sometida a un servilismo forzoso. El esclavo llegado de África eran llamado Bozal, mientras que el nacido en la Isla, Criollo. Según Don Fernando Ortiz, los primeros se clasificaban en Muleques (6-14 años); Mulecones (14-18 años); Piezas (18-35). Cuando aprendían el idioma español los llamaban ladinos
- ↑ Asiento: Sistema implementado en España y Portugal para autorizar la importación de negros esclavos en sus posesiones. Constituido por un contrato formal, nominativo, donde se regulaban las condiciones del mismo; tiempo de duración, cantidad a importar por año, impuestos aplicados y demás requisitos normales de los contratos comerciales.
- ↑ Afianzar: Prestar una garantía o aval a favor de otra persona para garantizar determinados intereses o derechos, o asegurar el cumplimiento de una obligación
- ↑ Guerra et al., tomo II, 1952, p. 210
- ↑ Seguro de Esclavo: Básicamente era un seguro de bienes, donde el riesgo cubierto era la muerte o incapacidad del esclavo, donde el asegurado era el dueño del mismo, por lo que no era un seguro de vida. El esclavo era el objeto del seguro.
- ↑ Tablada, 2007, pp. 238-239
- ↑ Erénchum, 1859, pp. 1461-1462
- ↑ Esclavos. Año 1857, Cuba (España colonial). Póliza sobre la vida de un esclavo. Consultado: 28 de noviembre de 2016.
- ↑ Erénchum, 1859, pp. 1470, 1472-1479; 1861a, pp. 2306, 2412; Tablada, 2007, pp. 238-239.
- ↑ Foto cortesía de la señora Ana Sojo Gil, Directora del Museo del Seguro del Instituto de Ciencias del Seguro. Fundación MAPFRE, España.
- ↑ Nación: En el contexto de la esclavitud cubana se denominaba nación al lugar de donde procedían en África, se reconocían las naciones Arará, Carabalí, Conga, Gangá y Lucumí. Se utilizaba este concepto como forma de clasificación.
Véase también
- Seguros en Cuba en la Colonia.
- Seguros en Cuba en la República.
- Seguros en Cuba en la Revolución
- Mercado de seguros en Cuba
- Póliza de seguro en Cuba
- Seguros de vida en Cuba
- Tablas de mortalidad para el seguro en Cuba
- Seguros para administrar riesgos en Cuba
Bibliografía
- Cruz Pasos, Rosell.: Seguros y administración de riesgos en Cuba. EAE, OmniScriptum Gmbh & Co. KG Saabrücken, Alemania 2013. ISBN: 978-3-959-07558-2.
- Cruz Pasos, Rosell. Hitos del Seguro en Cuba. EAE, OmniScriptum Gmbh & Co. KG Saabrücken, Alemania. 2016, ISBN: 978-3-639-78118-2.
- Erénchum Medrano, Félix.: Anales de la Isla de Cuba. Diccionario Administrativo, Económico, Estadístico y Legislativo. Año 1855 (A-B) Imprenta del Tiempo, calle Cuba Nº 110. La Habana 1856. Harvard College Library, Collection on Cuba.
- Erénchum Medrano, Félix.: Anales de la Isla de Cuba. Diccionario Administrativo, Económico, Estadístico y Legislativo. Año 1856 (B-E) Imprenta la Habanera, calle Aguacate Nº 62. La Habana 1858b. Harvard College Library, Collection on Cuba.
- Erénchum Medrano, Félix.: Anales de la Isla de Cuba. Diccionario Administrativo, Económico, Estadístico y Legislativo. Año 1855 (D-L) Imprenta La Antilla, calle Cuba Nº 28 ½ La Habana 1859. Harvard College Library, Collection on Cuba.
- Guerra Sánchez, Ramiro; José M. Pérez Cabrera; Juan J. Ramos y Emeterio S. Santovenia.: Historia de la Nación Cubana. Editorial de la Nación Cubana, S. A. 10 tomos. La Habana 1952.
- Jenks, Leland H.: Nuestra Colonia de Cuba. Editorial Palestra. Buenos Aires 1930. Primera reimpresión, La Habana, Cuba 1959.
- Sojo Gil, Ana: Museo del seguro. Fundación MAPFRE, Madrid 2010. ISBN: 978-84-9844-209-0.
- Tablada, Carlos y Galia Castelló.: La Historia de la Banca en Cuba. Del siglo XIX al XXI. Tomo I La Colonia. 2da edición. Editorial Ciencias Sociales, La Habana 2007. ISBN: 978-959-06-1029-5.