Yuniasky Crespo Baquero

Yuniasky Crespo Baquero
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Yuniasky Crespo Baquero
NombreYuniasky Crespo Baquero
NacionalidadCubana
CiudadaníaCubana
OcupaciónPrimera Secretaria de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC)
TítuloLicenciada en Marxismo Leninismo e Historia
PredecesorLiudmila Álamo Dueñas
Partido políticoPartido Comunista de Cuba
Sitio web
https://www.facebook.com/yuniaskycrespobaquero y https://twitter.com/yuniaskycrespo

Yuniasky Crespo Baquero. Miembro del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y del Consejo de Estado. Primera Secretaria del Comité Nacional de la UJC.

Nació en la provincia de Las Tunas, Cuba. Estudió la carrera de Marxismo Leninismo e Historia en el Instituto Superior Pedagógico “Pepito Tey”, donde fue elegida como miembro del Comité de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC) así como vicepresidenta y presidenta de la Federación de Estudiantes Universitarios (FEU) en el centro.

Entre 1998 y el 2002 formó parte del Secretariado Nacional de la FEU.Participó en el III Congreso de la Organización de Pioneros José Martí (OPJM) y en el X Congreso de la Federación de Estudiantes de la Enseñanza Media (FEEM).

Uno de los momentos más significativos de su vida estudiantil, fue la participación en el acto central por el 71 aniversario de la muerte de Julio Antonio Mella, en México. También estuvo presente en encuentros juveniles en Paraguay, Uruguay, Argentina y Francia.

En ese período fue electa delegada al VI Congreso de la FEU, el XII Congreso de la Organización Continental Latinoamericana y Caribeña de Estudiantes (OCLAE) y al VIII, IX y X Congreso de la UJC, organización de la cual es miembro del Comité Nacional desde el año 2005.

Entre 1996 y 1998, y desde el 2004 al 2009, formó parte del Buró Provincial de la UJC en Las Tunas. En 2002 fue promovida al trabajo profesional en su provincia natal, donde llegó a ocupar en 2005 el cargo de Primera Secretaria del Comité Municipal de Las Tunas.

A partir de los acuerdos derivados del V Pleno de la UJC, celebrado en el 2007, se vinculó al IPVCE Luis Urquiza Jorge como profesora de Historia. Fue la Secretaria General de la UJC del centro y delegada al IX Congreso de la organización política juvenil. Por sus resultados de trabajo, resultó Vanguardia Sindical en los cursos del 2009 al 2011.

En abril de 2011, se convirtió en Primera Secretaria de la UJC en la provincia de Las Tunas, y luego, en el 2012, fue elegida como Primera Secretaria del Comité Nacional de la organización.[1].

También ese año, participó como delegada a la I Conferencia del Partido Comunista de Cuba (PCC).

Ha representado a la juventud cubana en reuniones convocadas por la Organización Iberoamericana de Juventud (OIJ) y la Federación Mundial de Juventudes Democráticas (FMJD). Fue delegada a los Festivales Mundiales de la Juventud y los Estudiantes en Argelia y Ecuador.

Participó en el debate especial de la Asamblea General de Naciones Unidas, convocado por el 20 Aniversario del Programa Mundial de Acción para la Juventud en 2015.

Es Miembro del Comité Central del Partido Comunista de Cuba desde julio de 2013[2].. También forma parte del Consejo de Estado y es diputada a la Asamblea Nacional del Poder Popular.

Su forma de entender la política, la historia, la realidad cubana y el presente de la juventud nacional, han quedado reveladas a partir de múltiples entrevistas[3] concedidas a algunos medios de prensa, sus artículos[4] y su participación en algunos espacios de debate.

En el espacio Último jueves, que organiza y promueve el equipo de la Revista Temas, Crespo Baquero explicó sus opiniones[5]. sobre algunos temas claves en la política cubana.

Sobre el o la dirigente socialista, comentó:

El dirigente socialista es parte del propio pueblo; nace de él. Lo distingue su compromiso con el proceso de construcción social, su sensibilidad humana, su capacidad para captar e incidir en la transformación de los fenómenos sociales, sus habilidades para dialogar y persuadir, pero sobre todo —como un revolucionario verdadero y siguiendo el precepto guevariano— debe estar guiado por grandes sentimientos de amor, los cuales se hacen patentes en su apego al pueblo, sin descuidar por ello las habilidades técnico-profesionales necesarias para conducir y guiar las tareas organizativas y de la administración de los bienes del Estado.

En este empeño es preciso no obviar algo certeramente definido por Frei Betto: «los nacidos en una sociedad socialista no son necesariamente socialistas». De ahí que en el sistema que construimos, los que ocupemos algún cargo directivo debamos estar siempre ante el escrutinio del pueblo que es quien identifica y acepta el liderazgo de sus dirigentes cuando estos son auténticos y poseen la moral suficiente que emana del ejemplo y la modestia, cualidades con las que nuestro pueblo es muy exigente, por haberlas apreciado cotidianamente en sus líderes históricos.

Sobre los mecanismos que pueden asegurar la comunicación política, expresó:

Antes que todo el contacto directo, el diálogo personal y la capacidad de escuchar. Muchas veces oímos a Fidel hablar de la labor hombre a hombre, de la necesidad de entender que en ocasiones es imposible persuadir o convencer a todo el mundo con un solo argumento, sin tomar en cuenta que dentro de los que escuchan existen formas de pensar, niveles intelectuales o culturales muy diversos. Sin conocer lo que ellos tienen que decir es muy probable que estemos gastando tiempo y energía en vano, y lo que es peor, que perdamos credibilidad; entonces aquellos a quienes queremos dirigir terminan por caer en la apatía. Lógicamente, a veces es imposible, desde los niveles superiores de dirección, conversar con todo el mundo, pero para ello existen los dirigentes de base, que son los más importantes. Sin embargo, no los preparamos lo suficiente para esa comunicación, y ese eslabón débil impide que la retroalimentación fluya y la gente se sienta escuchada.

Sobre el disenso político, dijo:

El disenso es lo opuesto al consenso. Un disenso entre revolucionarios es muy necesario pues se convierte en la base para el desarrollo. En Cuba pareciera que nunca lo hubo, lo cual no es real, y abundan los ejemplos. En relación con si existe «oposición leal» en el socialismo, es importante clarificar primero ciertos términos. En la actualidad, la palabra oposición es utilizada para definir a un grupo que, con un programa político, y estructura organizativa, bajo la legalidad de un país, se propone tomar el poder mediante un proceso eleccionario. Este grupo también comparte el poder mediante otras estructuras como parlamentos, asambleas, ministerios, etc. Entonces, ¿existe en algún lugar la «oposición leal»? No creo que el término encuentre ejemplos donde sustentarse. Es fácil apreciar que en Cuba todavía no conocemos esa oposición, porque, como mencionaba antes, las personas financiadas por un gobierno extranjero para derrocar la Revolución no pueden llamarse sino mercenarios. No creo tampoco que hayamos alcanzado la democracia ideal; aún faltan muchos recursos por explotar para desarrollar este complejo proceso. No descarto ninguna fórmula que se lleve a cabo para más socialismo; la dialéctica propia del proceso conducirá necesariamente al perfeccionamiento de nuestro sistema.

Sobre la despolitización de la juventud, comentó:

Sobre este tema, con motivo del reciente aniversario de la UJC, el 4 de abril, expresé en Juventud Rebelde que la apatía política y la falta de compromiso son tal vez las armas a las que más apuesta el enemigo y no me refiero solo al enemigo de la Revolución cubana, sino al de las fuerzas progresistas en el mundo. A este le conviene que los jóvenes no se comprometan con la amarga realidad de nuestro mundo, le interesa tenerlos al margen, sumergidos en sus asuntos personales, hipnotizados con la pseudocultura, presos del mercado o de las drogas. No creo que, en nuestro país, la despolitización sea un fenómeno afianzado en la juventud como sector social, porque los elevados niveles de instrucción que hoy tenemos han potenciado la existencia de una cultura política que es real, tangible, y que se aprecia en nuestras universidades, en los debates que se generan entre los más jóvenes, en diferentes niveles. Es nuestra responsabilidad que las nuevas generaciones se entusiasmen y formen parte, no como espectadores, sino como protagonistas del proyecto nacional. Para eso tienen que estar dotados de argumentos que no pueden ser formales ni aprendidos de memoria; conocer la realidad del mundo, y nuestra historia, no como sucesión cronológica de hechos, sino con todas sus aristas, logros y errores.

Sobre la dimensión de género en el quehacer político, opinó:

En materia de género, creo que es una de las cosas en las que más se ha avanzado, sin que aún estemos satisfechos. Si se compara la situación actual con la existente hace solo unas décadas será posible constatar que el salto es significativo, que los tabúes van desapareciendo, que se va haciendo más común la presencia femenina, con sus rasgos y su estilo, en los diferentes niveles de dirección del país. Por solo citar dos ejemplos, de los miembros del Consejo de Estado, 41% son mujeres, y en la propia UJC, en más de noventa municipios del país son mujeres las primeras secretarias. A mi entender, esos son pasos consolidados y en ascenso.


Referencias

  1. Yuniasky Crespo Baquero, Primera Secretaria de la UJC. Disponible en Radio Angulo. Consultado el 25 de septiembre de 2012
  2. Anuncian cambios en el Comité Central del Partido Comunista de Cuba. Disponible en Prensa Latina. Consultado el 3 de julio de 2013
  3. El trabajo político hay que sentirlo Disponible en Juventud Rebelde. Consultado el 12 de mayo del 2016
  4. Una fecha que es de todos Disponible en Juventud Rebelde. Consultado el 12 de mayo del 2016
  5. Yuniasky Crespo en diálogo con Temas: ¿qué significa ser dirigente socialista? Disponible en Revista Temas. Consultado el 12 de mayo del 2016