Francisco Javier de Ulloa

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Francisco Javier de Ulloa
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Francisco Javier Ulloa.jpg
Vigésimo segundo Capitán General de la Real Armada Española.
Ministro de Marina
1832 - 1833
PredecesorLuis María Salazar Salazar
SucesorJosé de la Cruz
Datos Personales
NombreFrancisco Javier de Ulloa y Ramírez de Laredo
Nacimiento17 de agosto de 1777
Isla de León, Cádiz, Bandera de Cruz de Borgoña.png Imperio de España
Fallecimiento1855
Madrid, Bandera el Imperio Español.png Reino de España (1833-1931)

Francisco Javier de Ulloa. Fue un Marino y Militar Español. Vigésimo segundo Capitán General de la Real Armada Española.

Síntesis Biográfica

Nació en la Isla de León, Cádiz, el 17 de agosto de 1777. Hijo de Don Antonio de Ulloa de la Torre Guiral y de la dama limeña Francisca Remírez de Laredo y Encalada, hija del I Conde de San Javier y Casa Laredo, perteneciente por lo tanto a una acaudalada familia con raíces en el Virreinato del Perú y Chile.

Sus primeros años

Sentó plaza de guardiamarina a los diez años de edad, en el año de 1787 y recibió casi al mismo tiempo el nombramiento de, Caballero de Justicia en la Orden de San Juan de Jerusalén. Cuando terminó sus estudios en enero del año de 1790, embarcó en el navío San Julián, realizando varios viajes por América del Norte, recalando en La Habana y dándole la noticia en el mes de noviembre de su ascenso a Alférez de Fragata.

Trayectoria Militar

Embarcado en el navío Reina Luisa, participo en la defensa de Tolón contra los convencionales franceses, en el año de 1793; cuando las tripulaciones hicieron pie a tierra en la defensa, se distinguió por su valor, estando a las órdenes de Don Federico Gravina. Realizó después en el mismo navío a las órdenes del general Lángara, el viaje para traer desde Liorna a Cartagena al príncipe de Parma. Fue ascendido en el mes de febrero del año de 1794 a Alférez de Navío. Poco después tomó parte en la defensa de Rosas, yendo embarcado en el navío Mejicano, en la escuadra del general Don Federico Gravina, con la cual estuvo en la defensa del cabo de Rosas. Terminada la guerra, llevó a cabo varias comisiones, primero a bordo de la fragata Esmeralda y poco después en el navío San Justo. En el año de 1802 fue ascendido a Teniente de Fragata. Estando en Cádiz, entre los días nueve y catorce de junio del año de 1808, fue uno de los muchos que participaron en los combates y posterior rendición de la escuadra francesa del almirante Rosily, cuya acción estaba al mando del general Ruiz de Apodaca, fue transbordado como comandante de una de las lanchas cañoneras, siendo destinado a la línea avanzada de combate. Fue ascendido a brigadier en el año de 1825, continuando en el puesto hasta el año de 1827, que se extinguió la plaza.

Ministro de Marina

En el año 1832 fue nombrado Ministro de Marina, así mismo el de Guerra interinamente, desempeñando con gran talento y energía, sin por ello descuidar la de su ramo. Estando en este cargo, tuvo que tomar enérgicas decisiones, para que la princesa Isabel, fuera aceptada como la reina Isabel II, todo esto sucedía cuando Fernando VII, cayó gravemente enfermo, fue ascendido a jefe de escuadra, conservando los honores del Consejo de Estado y nombrado caballero Gran cruz de la orden de San Hermenegildo. Al fallecimiento del rey Fernando VII, fue reemplazado el gabinete y a Ulloa se le confió la comandancia general del cuerpo de artillería de marina y vocal de la Junta del departamento de Cádiz; siendo elegido por esta provincia como representante de los Procuradores del Reino, estando presente en las legislaturas de los años de 1834 y 1835. La reina Gobernadora, doña María Cristina de Borbón sentía un aprecio especial por Ulloa, por la firmeza con que había defendido los derechos de sucesión de su hija, haciendo posible su subida al trono, y en reconocimiento a su lealtad le concedió la Gran Cruz de Isabel la Católica.

Capitán General de la Armada

En el año de 1847, fue nombrado vicepresidente de la Junta Consultiva de la Armada y al establecer al año siguiente la dirección general, se le nombró presidente y ascendido a la suprema dignidad de Capitán General de la Real Armada. Durante el tiempo que estuvo al frente de la dirección general, se comenzó la construcción de dos navíos, cinco fragatas con máquinas de vapor, una corbeta, cinco bergantines, dos goletas, diecisiete vapores de ruedas, cinco urcas y otros buques de menor porte

Fallecimiento

Falleció en Madrid en el año de 1855, con setenta y ocho años de edad.

Fuentes