Fantasía sexual
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Las fantasías sexuales son representaciones mentales creadas por el inconsciente teniendo como tema principal las relaciones sexuales. Se producen de forma voluntaria o involuntaria en nuestra mente. Si bien las fantasías sexuales son poco comentadas con otras personas, o no mencionadas en lo absoluto, son bastante comunes. Éstas comienzan con la pubertad y suelen acompañar al ser humano durante toda su existencia. A pesar de la popular creencia de que el varón es el que tienen mayor actividad sexual y por consiguiente más fantasías sexuales, se ha probado que hombre y mujeres fantasean al mismo nivel, solo que en diferente forma.
Las fantasías sexuales
Masculina
Clasificar las fantasías es un trabajo arduo, su número, tipo y calidad es tan grande como seres vivos puedan crearlas con total libertad y privacidad, muchas nunca se contarán. Las fantasías masculinas suelen centrarse en el control de la situación y en la capacidad sexual. Las más frecuentes son las siguientes:
- Tener relaciones sexuales con una pareja distinta a la propia.
- Tener relaciones dentro de un grupo (orgía).
- Mantener una relación en la que se incluyan escenas violentas como el sadismo o masoquismo, siendo él el que domina a una mujer sumisa que lo consiente y satisface o bien es el que debe obedecer y satisfacer los deseos de otra persona dominante.
- Tener relaciones sexuales con personas del mismo sexo.
- Tener relaciones sexuales con parejas anteriores.
- Hacer el amor en lugar distinto al acostumbrado.
- Hacer el amor con su propia pareja de manera diferente a como se realiza habitualmente (oral, anal, o de otra manera donde la pareja sea más participativa).
- Ser objeto de una violación por parte de una mujer.
Femenina
Las fantasías sexuales de las mujeres en muchos casos coinciden con argumentos imaginados por los hombres. Las fantasías femeninas parecen caracterizarse por ser de mayor duración que las de los varones y centrarse en relaciones sentimentales. Las más frecuentes son:
- Imaginarse mantener relaciones sexuales con otro hombre distinto al habitual (su marido o su pareja).
- Pensar que está siendo objeto de una violación, ya sea con un hombre o más de uno.
- Imaginar que se halla violando a un hombre, sometiéndolo a su voluntad.
- Figurarse que está poseyendo o siendo poseída por otra mujer.
- Rememorar otras experiencias sexuales mantenidas en el pasado.
- Mantener una relación en la que se incluyan escenas violentas como el sadismo o masoquismo, siendo ella la que domina a un hombre sumiso que la consiente y satisface o bien es la que debe obedecer y satisfacer los deseos de otra persona dominante.
- Tener relaciones en un lugar más excitante (piscina, ascensor, baño de un avión, etc).