Tomás Reyna y Reyna

Tomás Reyna y Reyna
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General
Años de servicio53
Servicio/ramaArtillería
Lugar de operaciónEspaña
CondecoracionesCruz de la Encomienda de la Real y distinguida Orden de Carlos III; Gran Cruz del Mérito Militar de 2.ª Clase; Llave de gentilhombre de Cámara de S. M; Gran Cruz de Isabel la Católica; Cruz, Gran Cruz y Placa de la Orden de San Hermenegildo, entre otras.

Nacimiento12 de abril de 1821
Sevilla. España
Fallecimiento6 de septiembre de 1896
Madrid. España
CónyugeMaría Josefa Massa
HijosMaría Teresa, Tomás, Cristóbal y José
PadresCristóbal de Reyna y Nieto, y María del Carmen Reyna y Wernimen

Tomás Reyna y Reyna: Sevilla, 12.IV.1821 - El Escorial (Madrid), 6.IX.1896. Mariscal de campo de Artillería.

Tomás Reyna fue uno de los más brillantes oficiales de artillería de todos los tiempos. Fueron sus padres Cristóbal de Reyna y Nieto, general de Artillería, y María del Carmen Reyna y Wernimen.

Estudios

Ingresó como cadete en el Real Colegio de Artillería de Alcalá de Henares el 3 de enero de 1836, donde fue nombrado sub-brigadier por su aplicación y finalizó sus estudios el 14 de julio de 1837 con el número 6 de su promoción, la 78 del Cuerpo de Artillería. Dominaba el inglés y francés. Perteneció a la quinta generación ininterrumpida de una secular saga de artilleros que ha llegado hasta nuestros días.

Trayectoria

De subteniente fue destinado al 5.º Regimiento, permaneciendo destacado en Toledo y Ciudad Real hasta febrero de 1839 que marchó al Ejército del Norte en la Brigada Montada del 2.º Departamento.

En marzo de 1839 ascendió a teniente de Artillería pasando destinado al 5.º Regimiento. Del 8 al 13 de mayo se encontró en la Batería de brecha en el sitio de los fuertes de Ramales y Guardamino, hasta que, ocupados, quedó de comandante de Artillería de los mismos. En septiembre se incorporó a una Batería de Montaña del 3er Departamento formando parte de la Columna de Operaciones en la provincia de Guadalajara.

El 15 de junio se encontró en la acción de Olmedilla en la que por los méritos que contrajo se le concedió el grado de capitán de Infantería. Continuó de operaciones en toda la expedición contra Balmaseda hasta la frontera de Francia y posteriormente hasta que terminó la guerra. En enero de 1841 pasó destinado a la Brigada Montada del 4.º y del 5.º Departamento con la que recorrió los distritos militares de Castilla la Nueva, Castilla la Vieja, provincias Vascongadas, Navarra, Aragón, Cataluña y Andalucía hasta diciembre de 1843. De enero de 1844 hasta julio de 1847 pasó destinado a la Brigada Montada del 1.º y 3er Departamento en los distritos de Cataluña y Andalucía.

En julio de 1847 ascendió a capitán de Artillería y pasó destinado como secretario del 3er Departamento de guarnición en Sevilla. Allí se encontró en la sublevación del 13 de mayo de 1848 que costó la vida a los coroneles de Artillería Aguilar y Rivas. En septiembre pasó destinado a la Fundición de Bronce de Sevilla como jefe de talleres.

En julio de 1855 ascendió a teniente coronel de Artillería y fue nombrado jefe de la Brigada de Artillería que se iba a organizar en Cádiz con objeto de embarcar con destino a Puerto Rico. El 6 de agosto embarcó en Cádiz llegando a Puerto Rico el 23. Permaneció en esa isla hasta enero de [[1861]] en que fue comisionado por el capitán general para comprar armamento en los Estados Unidos de América. Allí permaneció hasta el 6 de agosto de 1861 que embarcó en Quebec con destino a Liverpool donde arribó el 15 de agosto y de donde pasó inmediatamente a Bélgica para continuar su comisión que terminó el 12 de febrero de 1862 que se firmó el contrato. Con objeto de volver a su destino en Puerto Rico regresó a la Península y estando en Cádiz, en espera de embarque en marzo, fue destinado a la Plana Mayor del 3er Departamento de Artillería de Sevilla.

En septiembre pasó destinado a la Escuela Práctica del Departamento y en diciembre fue destinado a la Academia de Artillería donde tras el incendio que prácticamente destruyó el Alcázar en marzo de 1862, le tocó organizar toda la enseñanza en el exconvento de San Francisco donde ya recibían formación los subtenientes alumnos en la denominada Escuela de Aplicación.

En 1864 fue el responsable de la organización de los actos del primer centenario de la creación del Colegio de Artillería a los que asistió la Reina Isabel II que hizo entrega de un nuevo Estandarte al Colegio. Por los méritos que contrajo durante su tiempo de director del Colegio recibió en agosto de 1864 la Cruz de la Encomienda de la Real y distinguida Orden de Carlos III.

En marzo de 1866 ascendió a coronel de Artillería y pasó destinado como director de la Fábrica de Trubia; allí, entre otras cosas, creó la Escuela de Artes y Oficio y una Sociedad Cooperativa para auxilio de los empleados de la fábrica. En julio de 1867 marchó en comisión a Francia e Inglaterra para estudiar los progresos de la fabricación del acero, hierro y latón, regresando a Madrid el 18 de noviembre donde permaneció redactando las noticias adquiridas en su viaje de interés para el ramo de la guerra junto con el mariscal de campo Elorza. En enero de 1868 regresó a Trubia.

El 12 abril de 1868 recibió la Encomienda de la Real y Distinguida Orden de Carlos III. En abril de 1871 pasó destinado a la Junta Superior Facultativa del Cuerpo de Artillería en Madrid y recibió la Gran Cruz del Mérito Militar de 2.ª Clase. El 1 de marzo de 1873 debido a la cuestión Hidalgo pasó a retirado y permaneció en esa situación hasta septiembre en que por un decreto del presidente Castellar se volvió a constituir el Cuerpo de Artillería, permaneciendo destinado en la Junta Superior del Cuerpo.

Durante el tiempo de la Disolución el general Reyna desempeñó un importante papel como presidente de la Junta que rigió los destinos del Cuerpo. Durante esta presidencia, Reyna, que era partidario de don Alfonso, hizo un viaje por Francia y Austria con objeto de coordinar la acción de todos los monárquicos contra la República, e incluso llegó a sugerir un pronunciamiento del Cuerpo de Artillería a favor de don Alfonso que fue rechazado por la Junta. En abril de 1874 recibió la Gran Cruz del Mérito Militar de 2.ª Clase del Presidente de la República por los servicios prestados desde la Junta Superior Facultativa para proyectar una cureña que permitiese el empleo de los obuses modelo Plasencia que se emplearon a toda prisa en el conflicto carlista y cantonal.

Tantos importantes servicios prestó a la causa de la restauración que quiso Isabel II que se encargase de la educación del príncipe Alfonso, lo que no llegó a verificarse. Sin embargo cuando la Restauración se lo quiso recompensar con la Llave de gentilhombre de Cámara de S. M. ante lo que Reyna pidió y obtuvo que no se le concediera. En 1875 cuando desembarcó el joven Rey fue comisionado Reyna para recibirle.

En enero de 1876 ascendió a brigadier de Artillería y quedó como vocal de la Junta Superior.

En julio de 1878 fue promovido a mariscal de campo de Artillería y nombrado comandante general subinspector del Cuerpo de Artillería del Ejército de Cuba, cargo que ejerció hasta el 29 de diciembre de 1884 en que regresó a la Península y quedó de cuartel en Madrid. En marzo de 1885 pasó destinado de comandante general subinspector de Artillería de Castilla la Nueva, cargo que ocupó hasta abril de 1889 en que pasó a la Sección de Reserva del Estado Mayor del Ejército a los sesenta y ocho años de edad y cincuenta y tres de servicio. En este caso quiso el Gobierno recompesar su dilatada carrera y sus importantes servicios con un título de Castilla que nuevamente rechazó Reyna. En marzo de 1892 recibió la Gran Cruz de Isabel la Católica.

Muerte

Falleció en el Escorial el 6 de septiembre de 1896 a los setenta y cinco años. Estuvo casado con María Josefa Massa, que falleció el 14 de abril de 1887, con la que tuvo una hija, María Teresa, y tres hijos, Tomás, Cristóbal y José, todos oficiales de Artillería.

Condecoraciones y otras distinciones

Estuvo en posesión de la Cruz, Gran Cruz y Placa de la Orden de San Hermenegildo. Fue nombrado académico de la Real Academia de Buenas Letras de Sevilla desde abril de 1888. Tenía reputación de poeta y se conservan numerosas poesías suyas entre otros en la Revista de Ciencias, Literatura y Artes de Sevilla.

Fuente

  • Archivo General Militar (Segovia), Secc. 1.ª, leg. R-712.
  • E. Oliver Copons, "Biografía del General don Tomás de Reyma y Reyna", en Memorial de Artillería, Serie IV, t. VI (1896) págs. 545-583.
  • J. Vigón, Historia de la Artillería Española, Madrid, Consejo Superior de Investigaciones Científicas, Instituto Jerónimo Zurita, 1947.