Alfonso González Álvarez
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Alfonso González Álvarez. Combatió contra la tiranía de Machado y posteriormente formó parte de la acción revolucionaria de Guiteras. Siendo miembro del Partido Ortodoxo combate al gobierno de Carlos Prío. Fue miembro del Movimiento 26 de Julio y jefe de este en Playa Caimito.
Sumario
Síntesis biográfica
Primeros años de vida
Alfonso González Álvarez nació el 2 de septiembre de 1916 en San Nicolás y 42 años más tarde se convirtió en héroe eterno de la patria.
Su procedencia humilde, lo obliga desde su infancia a afrontar los rigores de la vida y sobreponerse al medio de injusticia que le rodea.
Apenas pudo alcanzar el cuarto grado de primaria, pues desde muy temprana edad tiene que dedicarse a las labores agrícolas. A los 18 años tiene que asumir la responsabilidad de mantener a su familia debido al fallecimiento de su padre.
El duro batallar a que se vió sometido desde su niñez forjó en él un carácter templado, su rebeldía encontró siempre salida, manifestándose abiertamente contra los distintos gobiernos, como los que atravesó la República Mediatizada y contra ella luchó en las organizaciones más progresistas que aparecían en las distintas épocas.
Participación revolucionaria
Siendo muy joven, combatió la tiranía de Machado y posteriormente formó parte de la acción revolucionaria de Guiteras.
Posteriormente forma parte del Partido Ortodoxo que, bajo la consigna de “Vergüenza contra Dinero” combate el gobierno corrompido de Carlos Prío, títere de tuno apoyado por el imperialismo yanqui.
En cuanto movimiento de avanzada surgía en nuestro país figuraba Alfonso, como uno de sus componentes.
Todas estas luchas fueron ahogadas en sangre, pero su carácter y su temperamento fueron endureciéndose y Alfonso nunca perdió la fe, tenía confianza en la victoria y la justicia.
Toda su vida transcurre en un batallar constante, y sus cualidades de valentía, honradez y desprendimiento, lejos de abandonarlo, se acrecientan y son sus únicas armas para la lucha.
Realizaba labores agrícolas en distintos lugares, pues como obrero tenía que vender su fuerza de trabajo al latifundista que lo necesitaba como única forma de sobrevivir. Por estas eventualidades no le garantizaban a ningún obrero el sustento de su familia. Alfonso decide dedicarse a la pesca donde podría conseguir mejores salarios.
La explotación a que se ve sometido durante toda su vida le reafirma su conciencia de clase y en estas condiciones le sorprende el traicionero cuartelazo del 10 de marzo, hecho que obtiene de él su inmediata repulsa.
Luchas contra la tiranía
Comienza entonces una nueva etapa de lucha en la vida de Alfonso, esta vez la más encarnizada, pues forma parte del Movimiento 26 de Julio y su decisión de lucha es demostrada en la práctica, hacen que rápidamente llegue a hacerse jefe de una célula del Movimiento en la Playa Caimito, lugar en que desempeñaba sus labores habituales.
Muerte
En todas las actividades clandestinas Alfonso da muestras de decisión y valor. El 30 de septiembre de 1958, fue sacado de su hogar, por agentes del SIM (Servicio Militar de Inteligencia), asesinos y matones a sueldo que actuaban en nombre de la tiranía servidora del imperialismo yanqui. Su cadáver fue lanzado a la calle por sus verdugos, encontrándose más tarde abandonado en el Reparto Obrero en la Ciudad de La Habana.
Su muerte demostró que supo vivir como vivió, lleno de valentía y dignidad, pues en los momentos más terribles en que los sicarios lo torturaban salvajemente, no salió de sus labios ni una palabra comprometedora para el Movimiento y sus compañeros de lucha.
Tenía al morir 42 años. Dejó una madre anciana y una hermana que posteriormente perdió sus facultades mentales para el resto de su vida.
Fuentes
- Asociación Combatientes San Nicolás
- Museo Municipal San Nicolás
