Ataques a Santa Rita (Granma)
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Ataques a Santa Rita (Granma). El 30 de marzo de 1870, fuerzas del Ejército Libertador, bajo el mando del mayor general Máximo Gómez, atacaron y tomaron este poblado. Otro ataque se produjo el 20 de diciembre de 1873 por una tropa bajo el mando del General Calixto García.
Localización
El poblado de Santa Rita), se encuentra a unos 10 km al suroeste de Jiguaní, antigua provincia de Oriente, hoy de Granma, en la llanura del río Cauto. No confundir con el lugar que también se conocía como Santa Rita, ubicado al noroeste de Las Tunas, donde tenía su campamento Vicente García.
Contextos
El mayor general Máximo Gómez el 20 de julio de 1870, tras la muerte de Donato Mármol, ocupó la jefatura de la División Cuba del Ejército Libertador, que abarcaba las jurisdicciones de Baracoa, Guantánamo, Santiago de Cuba y El Cobre. Ese año respondió a los anuncios de pacificación del gobierno colonial con las acciones de Río Abajo, El Mijial, Pinalito, Majaguabo, El Cristal, Ti Arriba, Nuevo Mundo, Loma del Gato y La Socapa.
El 27 de octubre de 1873 la Cámara de Representantes destituyó al presidente de la República en Armas, Carlos Manuel de Céspedes, acción apoyada por Calixto García, quien en noviembre, al desaparecer el Departamento Provisional del Cauto, se convirtió en jefe de toda la provincia oriental (1er Cuerpo), pues se le subordinaron los distritos de Jiguaní, Bayamo, Manzanillo y Las Tunas. El 10 de ese mes Calixto penetró en la ciudad de Manzanillo, después de atacarla desde cuatro direcciones. Terminó 1873 con las acciones de Bueycito, Palmas Altas, Boquerón y Santa Rita.
Desarrollo
Primer ataque. El 30 de marzo de 1870, fuerzas del Ejército Libertador, bajo el mando del Mayor General Máximo Gómez, atacaron este poblado, el cual fue tomado y posteriormente saqueado e incendiado. Las bajas del enemigo fueron seis muertos.
Segundo ataque. El 20 de diciembre de 1873, fuerzas del Ejército Libertador, en número de unos 250 hombres, bajo el mando del General Calixto García atacaron Santa Rita, cuya guarnición estaba integrada por 50 hombres del Regimiento de Antequera y voluntarios de la localidad dirigidos por Francisco Dellundé, capitán pedáneo del término.
Después que la vanguardia cubana rebasó la empalizada de unos 10-12 pies de altura que rodeaba el pueblo, por el error de seguir avanzando sin mantener la entrada en sus manos, los españoles cerraron el portón separando a las tropas que ya habían entrado del grueso que aún se hallaba afuera. Los de adentro sufrieron el fuego cerrado del enemigo, del cual muy pocos pudieron escapar saltando el alto valladar.
Allí murieron algunos oficiales cubanos, entre ellos el Coronel Urquiola y el teniente Coronel Saladrigas, y buen número de soldados sin que el objetivo pudiera lograrse.
Fuentes
- Arcadio Ríos. Hechos y personajes de la Historia de Cuba. Recopilación Bibliográfica. La Habana, 2015. 320 p.
- Diccionario enciclopédico de Historia Militar de Cuba. Tomo II. Acciones combativas. Centro de Estudios Militares de las FAR, 2006.
- Máximo Gómez. Diario de campaña, La Habana, 1968. Págs. 13-14-
- Colectivo de autores: Mayor general Máximo Gómez. Sus campañas militares, La Habana, 1986. Tomo I. Pág. 18.
- Dirección Política de las FAR. Historia militar de Cuba. La Guerra de los Diez Años, La Habana. [Sin autor.] Pág. 62.
- Juan E. Casasús. Calixto García. El estratega, La Habana, 1962. Pág. 90.
