Cleantes
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Cleantes de Aso. Fue un filósofo estoico griego y el sucesor de Zenón como el segundo jefe de la escuela estoica en Atenas.
Síntesis biográfica
Nació en Aso, Grecia - en el año 330 a.n.e. Originalmente fue un boxeador, que llegó a Atenas, donde asumió la filosofía de escuchar conferencias de Zenón. Fue su discípulo y su sucesor como el segundo jefe de la escuela estoica en Atenas, de la cual fue su director tras la muerte de Zenón. Vivió en el siglo III a.n.e.
Vida
Cleantes nació en Aso, en la Tróade unos 330 antes de Cristo. Él era el hijo de Phanias, primero fue un boxeador. Pero cuando llegó a Atenas, con excepción de cuatro dracmas en su poder, asumió la filosofía, dedicándose fuertemente a ella, escuchando primero las conferencias de Crates el Cínico, y luego a las de Zenón, el estoico, persistiendo en los dogmas de el. Con el fin de mantenerse a sí mismo, trabajaba toda la noche como aguador a un jardinero. Y dedicaba el día entero en el estudio de la filosofía sin medios visibles de apoyo, fue citado a comparecer ante el Areópago para dar cuenta de su forma de vida. Los jueces quedaron tan encantados con la evidencia de la obra que produce, para que le votaron diez MINAE, aunque Zenón no permitiría que él acepta.
Era un hombre de gran paciencia y lentitud. Despertó gran estima por sus altas cualidades morales, a la muerte de Zenón en 262, se convirtió en el líder de la escuela, un puesto que ocupó durante los próximos 32 años. Cleantes conservo y desarrollo doctrinas de Zenón con éxito. Continuó, sin embargo, para mantenerse a sí mismo por el trabajo de sus propias manos. Entre sus alumnos eran su sucesor, Crisipo y Antígono II Gonatas, de quien aceptó 3.000 MINAE.
Aportes
Cleantes era una figura importante en el desarrollo del estoicismo, y estampó su personalidad en las especulaciones físicas de la escuela, y por su materialismo dieron una unidad en el sistema estoico. Él escribió unas cincuenta obras, de las cuales sólo han sobrevivido fragmentos preservados por escritores como Diógenes Larcio, Stobaeus, Cicerón, Séneca y Plutarco.
De los muchos escritos que le atribuye Diógenes Laercio (unos 50), se destaca uno de 40 versos del Himno a Zeus, que es la más inspirada expresión del concepto religioso estoico en homenaje a la mente divina regidora del cosmos.
Cultivó la Teología, la Física y la Lógica, pero sus aportes más importantes a la escuela fueron en el campo religioso.
Cleantes revoluciono la física estoica por la teoría de la tensión que caracteriza el materialismo estoico de toda concepción de la materia como muerto e inerte. Él desarrolló el panteísmo estoico, y aplicó sus ideas materialistas a la lógica y la ética. Así, argumentó que el alma era una sustancia material, y que esto fue demostrado por el hecho de que no sólo las cualidades físicas, sino también la capacidad mental, son transmitidas por la generación ordinaria de padres a hijos, y por la simpatía del alma con el cuerpo.
Veía el sol como ser divino, porque el Sol sostiene todas las cosas que viven, por lo que también debe ser parte del fuego vivificante o éter del universo.
Cleantes sostenían que el placer no sólo es un bien, pero es "contra natura" y "valor". Era su opinión que las pasiones son debilidades: carecen de tensión que persistentemente destacó, y en el que la fuerza del alma, no menos que la del cuerpo, depende, y que constituye en seres humanos de autocontrol, la fuerza moral, y también las condiciones de todas las virtudes. Él dijo en un pasaje sorprendente: "La gente camina en la maldad toda su vida o, en todo caso, para la mayor parte de ella si es que alguna vez alcanzar la virtud, es tarde y en el mismo atardecer de sus días."
A él se le atribuye la conocida fórmula estoica de que el objetivo es "vivir constantemente con la naturaleza." Para Cleantes, esto significa, en primer lugar, que viven conforme á lo largo del universo, porque el universo está bajo el gobierno de la razón, y todo el mundo lo tiene como su privilegio de conocer y familiarizarse con el mundo, por supuesto, reconocer lo más racional y alegremente para ajustarse a la misma. Esto, según él, es la verdadera libertad de no actuar sin motivo o fuera de propósito fijo, o caprichosamente, sino que humildemente consentir en el orden universal, y, por tanto, de todo lo que acontece a uno. La dirección a seguir la naturaleza universal se puede rastrear en su famosa oración:
Yo, Zeus, y tú también, Destiny plomo, para donde quiera que sus decretos me han asignado. Sigo con facilidad, pero si decido no, Desgraciado aunque estoy, tengo que seguir siendo. El destino guía a la buena voluntad, pero arrastra a los reacios.
Mientras que su sucesor Crisipo, insistía en la Lógica y en la Física, Cleantes prefirió la Teología y la moral, haciendo de la filosofía una regla para su vida.
Fue el creador del concepto de lektón o expresión enunciable.
Muerte
Murió en el 233 a.n.e.. Se dice que una úlcera peligrosa le había obligado a ayunar durante un tiempo. Posteriormente los médicos le permitieron que comiese ya la mismo que solía comer pero el continuó su abstinencia, diciendo que, «ya tenía mucho camino andado»; como él ya estaba a mitad de camino, en el camino de la muerte, no se molestó en volver sobre sus pasos. Simplicio, que escribió en el siglo VI, menciona que una estatua de Cleantes era todavía visible en Asón, que había sido erigido por el Senado romano.
