Hiperglucemia
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Hiperglucemia. Del griego hyper, por encima, más allá, glukús, e histos, tejido, que significa acumulación de glucosa en los tejidos en sangre superior a lo normal (nivel superior a 120 después de una comida o superior a 80 después de un ayuno). Generalmente esta condición no se siente a menos que la glucosa esté muy alta, por arriba de los 180 mg/dl, que es cuando aparecen los síntomas.
Causas
- Menor producción de insulina en su cuerpo debido a la progresión de la diabetes Tipo 2.
- Pérdida u olvido de tomar la medicación para diabetes (insulina o pastillas para la diabetes)
- Comer demasiado.
- Comer lo que no debe.
- Menor ejercicio que el habitual.
- Su causa más frecuente es la Diabetes mellitus.
- Las infecciones, sobre todo las de las vías urinarias y las de las vías respiratorias, son la causa principal de hospitalización de una persona con diabetes. De hecho, cuando hay diabetes, cualquier enfermedad implica un riesgo de hiperglucemia, por lo que se debe medir la glucosa más frecuentemente.
- El estrés, cuando se pasa por períodos difíciles en el trabajo o en la situación familiar, así como otras preocupaciones, la glucosa sube.
Ya que como el cuerpo está en una emergencia, secreta la hormona adrenalina. Esta hormona es la que prepara al cuerpo para luchar o para huir, también hace que aumente en la sangre el combustible, que es la glucosa, para poder enfrentar el peligro. Por esto es tan importante medir frecuentemente la glucosa de la sangre con el monitor que se debe tener en la casa. La información de esa medición puede utilizarse para saber cómo comer, cuándo se debe hacer ejercicio y cuándo se debe acudir al médico, según lo indicado por el equipo de salud. Además, esa información le sirve al médico o al dietista para hacer ajustes al tratamiento que esté llevando a cabo la persona.
Síntomas
- Orinar frecuentemente.
- Cansancio/ fatiga.
- Piel seca
- Picazón.
- Mala cicatrización de las heridas.
- Desmayo / Coma Diabético (si se ignora el azúcar alto por un período de tiempo).
- Consumir otros medicamentos que puedan afectar el nivel de azúcar.
- Padecer una infección o enfermedad.
- Estar muy sediento
- Tener visión borrosa
Como la hiperglucemia no presenta síntomas a menos que la glucosa esté muy alta, muchas personas con diabetes padecen de esa enfermedad por varios años sin darse cuenta.
Lo que ocurre es que poco a poco la glucosa comienza a elevarse a cifras superiores a lo normal, que son 110 mg/dl en ayuna, y las personas no lo notan. Incluso, se calcula que una tercera parte de las personas que tienen diabetes no han sido diagnosticadas porque no tienen síntomas y no se han hecho un chequeo.
Lo más difícil es que la hiperglucemia afecta al cuerpo a largo plazo debido al desarrollo de problemas en las arterias, tanto en las grandes como las coronarias como en las pequeñas como las de los riñones, la retina o los pies.
Cuando la glucosa de la sangre está sobre los 180 mg/dl se llevan a cabo varios procesos metabólicos que también están relacionados con el colesterol y que terminan por dañar la pared de las arterias endureciéndolas y lastimándolas. También se afecta la circulación. Por eso es que la diabetes descontrolada es la causa principal de ceguera, de insuficiencia renal o de amputaciones que no son por accidente.
Tratamiento
- Tomar muchos líquidos para evitar la deshidratación.
- Seguir la toma de medicamentos al pie de la letra.
- Comer normalmente pero evitar los alimentos ricos en azúcares o almidones que puedan elevar más la glucosa de la sangre.
- Evitar hacer ejercicio si está muy alta ya que puede elevarse más.
- Medir la glucosa frecuentemente, de cada dos a cuatro horas.
- Acudir al médico de inmediato si se tiene diabetes tipo 2 y la glucosa está por arriba de los 300 mg/dl.
- Para mantener un buen control de la glucosa hay que evitar dejar de tomar los medicamentos o aplicarse la insulina y hay que seguir un plan de alimentación y hacer ejercicio.
- Recuerda que se debe mantener la glucosa lo más cerca de lo normal, o sea, alrededor de los 110 mg/dl en ayuna o por debajo de los 140 mg/dl dos horas después de las comidas. De esta manera, se disminuirá el riesgo de desarrollar complicaciones crónicas. No es tan difícil, es más bien un reto permanente de disciplina y buenos hábitos de vida que vale la pena intentar.
Efecto hiperglucemiante, que sigue espontáneamente a la recuperación de una crisis hipoglucémica, está causado por la liberación de hormonas contrainsulares, como la hormona de crecimiento, elglucagón, el cortisol y las catecolaminas.