José Agustín Quintero
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José Agustín Quintero. Entre otras cosas, fue periodista, diplomático, abogado, traductor, poeta y revolucionario.
Síntesis biográfica
Padres y estudios
Nació el 6 de mayo de 1829 en La Habana. Su padre se llamó Antonio Quintero y su madre Anna Woodville, estudió en el Colegio de San Cristóbal y, según informes en la Universidad de Harvard, aunque hay constancia de él no sobrevive.
Quintero fue amigo de Henry Wadsworth Longfellow y tradujo su obra y la de otros poetas, como Tensión. Se graduó de la escuela de derecho en La Habana y se convirtió en un periodista que escribe para la revolución patriota cubano.
Vida y obra
La vida de Quintero fue agitada y fecunda en peripecias. En su mocedad vivió en los Estados Unidos, consagrado al estudio. Regresó a Cuba en 1848. Complicado en las conspiraciones separatistas de mediados del siglo, fue preso en unión de Cirilo Villaverde, Juan Bellido de Luna entre otros, y condenado a presidio. Logró evadirse y fue a residir nuevamente en los Estados Unidos (primero en Louisiana y después en Texas).
Al estallar en 1861 la guerra iniciada por los Confederados del Sur para separarse de los Estados del Norte, Quintero, que había obtenido carta de ciudadanía estadounidense, tomó partido por la confederación sudista. Era amigo personal del presidente de la Confederación, Jefferson Davis, quien lo envió en misión especial a México. Allí combatió en defensa de la República que presidía Benito Juárez. Nunca han sido reunidas en forma de libro las poesías de Quintero, que han quedado dispersas en publicaciones periódicas de su tiempo.
En colecciones antológicas han sido recogidas además de la paráfrasis de Rückert, las claras y sonoras estrofas de ¡Adelante!; una silva erótica de poco mérito, “Retorno al delirio”; otra silva, “Memorias del alma”, en la que el tema erótico va enlazado con la evocación de hazañas guerreras; unas sextinas, “Esperanza”, escritas en la prisión; un episodio que consta de 6 estrofas, “El tiro”, donde desarrolla un tema que asumió formas diversas en la época romántica: dos hermanos que luchan en bandos opuestos; unos serventesios “A miss Lydia Robins”; y “El banquete del destierro,” la más afamada de sus composiciones, que era recitada con fervor y exaltación por los emigrados cubanos.
Arraigó un tiempo en México, donde contrajo matrimonio, pero en 1868 estaba de regreso en La Habana, donde fue redactor del Boletín Comercial. Solicitó entonces autorización para ejercer en Cuba la profesión de abogado, amparado por un título que obtuvo en Texas y revalidó en México. No llegó a hacer uso de esa autorización, que en definitiva le fue concedida a comienzos de 1869, porque en octubre de 1868 había estallado la revolución separatista encabezada por Carlos Manuel de Céspedes, y los antecedentes de Quintero lo hacían sospechoso a las autoridades españolas. Resolvió, en vista de ello, expatriarse nuevamente.
Muerte
No volvió más a Cuba y murió en Nueva Orleáns el 7 de septiembre de 1885.
Fuentes
- Libro: Panorama Histórico de la literatura cubana