Silla Acapulco
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Silla Acapulco . La Silla Acapulco es la combinación perfecta de estilo y confort. Este asiento, creado por artesanos acapulqueños anónimos, está inspirado en uno de los diseños más reconocidos de los años 50 y lleva el nombre de una de las ciudades mexicanas más famosas. Es práctica, original y atractiva, además de elegante y muy ergonómica, se adapta perfectamente a tu cuerpo. Presenta una silueta inconfundible. La estructura de las patas es de acero soldado y el cuerpo está fabricado en plástico de polietileno, un material muy resistente y 100% reciclable, que la dota de una gran flexibilidad y comodidad. Dado que su proceso de elaboración sigue las antiguas técnicas de tejido Maya y es 100% artesanal, pueden experimentar variaciones e imperfecciones propias de esta práctica. Pequeños detalles que, a su vez, convierten cada silla Acapulco en un producto único e inigualable. Gracias a su gran variedad de colores, podrás crear un espacio único, particular y con mucha personalidad. Es perfecta como mobiliario de interior y exterior.
Historia
La silla Acapulco lleva el nombre del legendario Resort Pacífico Acapulco en México, junto al famoso acantilado de buceo “La Quebrada”, un lugar visitado por diversas celebridades de la época.
Acapulco se convirtió en la década de los años 50 en el refugio de las grandes estrellas de Hollywood: los Kennedy, Elvis Presley, Elisabeth Taylor y John Wayne, entre otros disfrutaban relajadamente en las sillas Acapulco que vestían las terrazas de este lujoso resort con vistas a la bahía, mientras se relajaban, tomaban el sol y un cóctel; convirtiéndose en uno de los diseños de sillas más míticos y reconocidos del siglo XX, la cual se vincula al lujo, sofisticación y las vacaciones.
La separación de los rayos conformaba una trama fresca y permeable, evitando el calor sofocante del verano Mexicano y emulando las antiguas técnicas de tejido Maya. En los años 60, con el auge del turismo en esta ciudad, se convirtió en una pieza clave para todas las terrazas y playas de Acapulco.
El diseño ha disfrutado de un éxito continuo durante casi cinco décadas – siendo el favorito de los diseñadores por sus líneas limpias y su comodidad. En sus inicios se fabricaba en varios talleres artesanales de México, pero poco a poco fue desapareciendo del mercado en la última década del siglo XX.
Su imagen Vintage (retro) ha traído de vuelta esta silla al mercado del siglo XXI, potenciada por el concepto de personalización. El lenguaje simple y característico de esta silla ha generado infinidad de versiones.
Al no tener copyright, y no existir planos originales del diseño, ni fabricante oficial, encontramos en el mercado gran cantidad de modalidades. Los modelos más conocidos son la propiamente dicha silla Acapulco, con su curioso diseño ovalado y la silla Condesa, la cual tiene un respaldo más redondo.
Actualmente es una silla de diseño catalogada como vintage, Esta silla se puede relacionar con un estilo folk mexicano por el uso de colores vivos.
Características
Diseñador: Anónimo (recuperada por thecommonproject)
Fabricante y distribuidor: thecommonproject
Año de diseño: 2011 (Reedición)
Medidas: 94cm de alto por 77 cm de ancho por 92 cm de profundidad.
Su estructura tubular es metálica y va recubierta por una pintura apta para exteriores e interiores, la tapicería está hecho a mano, usando una técnica que empleaban los mayas para tejer sus hamacas, en este caso en lugar de usar fibras naturales utilizan cuerda de rattán sintético, PVC o vinilo.
La silla Acapulco no necesita un excesivo mantenimiento, limpiarla con agua, jabón y procurar secarla bien para que no se acumule humedad entre las cuerdas, de vez en cuando. El resultado es una silla extremadamente cómoda y original con un diseño desenfadado, disponible en una gran variedad de tonos brillantes y divertidos.
Fuente
- Artículo: Silla Acapulco de thecommonproject. Disponible en “disenoyarquitectura.net”. Consultado: 8 de enero de 2018.
- Artículo: Silla Acapulco. Disponible en “historia-disenio-industrial.blogspot.com”. Consultado: 8 de enero de 2018.