Tiranía
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Tiranía. Es un término que procede de un vocablo griego y que hace referencia al abuso de poder, fuerza o superioridad.
Sumario
Introcucción
El término tiranía se emplea para definir a un régimen abusivo y cruel, que ejerce el control únicamente en beneficio propio. Por esta razón, se lo considera carente de legitimidad, no sólo por su situación de origen, sino también por la injusticia con la que se pone en práctica y por la fuerte represión a las voces opositoras.
Etimología
La palabra tiranía se empleó por primera vez en la Grecia antigua, para catalogar el régimen de Giges de Lidia, quien había ascendido al trono a través de mecanismos de fuerza (de facto) y no de ley (de iure).
A partir de entonces se empleó el término tirano para distintos y feroces gobernantes, como Ortágoras de Sición, Fidón de Argos y Clípselo de Corinto, considerados entonces los primeros “tiranos” oficiales de la historia, si bien muchos otros habría existido antes de la invención de la palabra.
Características de la tiranía
- Ilegitimidad
Un tirano puede ascender al poder con la intervención y apoyo de fuerzas extranjeras.
En principio, como se ha dicho, todo tirano asciende al poder de facto, es decir, mediante la fuerza y la violencia: a través de un Golpe de Estado, de una intervención de fuerzas extranjeras o, incluso, mediante una insurrección popular. Esto puede significar, hoy en día, numerosas artimañas políticas o engaños, pero en todo caso coinciden con el origen ilícito y por fuera de la ley del gobierno del tirano.
- Autoritarismo
Sea cual sea el origen del mismo, el poder que el tirano esgrime se sustenta siempre en la fuerza y la opresión violenta, y no en el acatamiento de las leyes. Un tirano gobierna de manera despótica, caprichosa, imponiendo su propia voluntad como ley a los demás, mediante la amenaza de ejercer la fuerza (militar).
Por otro lado, los tiranos una vez instalados en el poder se niegan a devolverlo al pueblo que gobiernan, o a ser relevados del trono a través de vías institucionales, pacíficas y consensuadas. Más bien hacen de todo por permanecer a cargo: violentan las leyes, eliminan o prohíben toda forma de oposición, recurren al engaño o a la coacción, etc.
- Injusticia
El bien común suele subyugarse a la voluntad del tirano.
Dado que el tirano controla una sociedad haciendo caso omiso a las leyes que, justamente, le prohibirían hacerse con el poder a la fuerza y manejarlo como le venga en gana, se trata de una forma de gobierno ilegítima e ilegal, en la que el bien común suele subyugarse a la voluntad del tirano. Así, la injusticia, la arbitrariedad y la crueldad acompañan al tirano y a sus secuaces, quienes ejercen el miedo y el dolor como mecanismos de control político y social.
- Represión
La represión de cualquier forma de oposición política o de cualquier intento de protesta o reclamo es típica de las tiranías. En las dictaduras modernas, por ejemplo, la persecución política, desaparición forzada, la prohibición de libertades fundamentales como de expresión, de libre asociación y de protesta son un elemento común y constante.
- Abusos
En una tiranía, el gobernante posee impunidad para los crímenes cometidos.
Dado que el tirano y sus aliados detentan el poder absoluto, sin tolerar cuestionamientos de otras personas, instituciones o comunidades, el abuso de poder es una realidad común de las tiranías. Esto se traduce en impunidad para los crímenes cometidos por los gobernantes, apropiaciones ilegales de bienes materiales, enriquecimiento ilícito y otras formas de corrupción.
- Caída
Al asesinato de un tirano se lo conoce como tiranicidio.
La caída de las tiranías suele ser tan violenta como su aparición, es decir, mediante insurrecciones masivas, rebeliones militares, huelgas generales o formas de presión similares que impiden el funcionamiento de la sociedad hasta tanto no se recupere la libertad.
Esto suele conducir o ser detonado por la muerte del caudillo, ante cuya ausencia las estructuras sostenidas por su figura y autoridad empiezan a derrumbarse. En casos excepcionales únicamente las tiranías han encontrado su fin mediante ejercicios democráticos o elecciones, ya que los tiranos suelen manipular el sistema a su favor.
- Tiranía de la mayoría
Con este término específico se denomina la posibilidad que entrañan los gobiernos democráticos, en que la mayoría dirige los destinos del país legalmente, de oprimir a una minoría que justamente por serlo no logra expresar su voz ni hacer valer sus puntos de vista.
Estudiosos del tema
Aristoteles fue uno de los filósofos que reflexionó sobre la tiranía.
Ha habido numerosos filósofos, artistas y pensadores políticos en la Historia cuyas reflexiones hoy día permiten definir y comprender la tiranía. Entre ellos destacan: Herodoto, Aristóteles, Plutarco, William Shakespeare, Nicolás Maquiavelo, Jean-Jacques Rousseau y John Locke.
Tiranos más conocidos
Gengis Kan, fue un guerrero mongol que fundó el Primer Imperio Mongol.
La lista de los tiranos que ha visto la historia humana es probablemente muy larga para siquiera intentar reproducirla, pero entre ellos existen algunos más recordados que otros, como son:
- Fálaris. Gobernó Agrigento, Sicilia, alrededor de 570 a.C.
- Calígula. Conocido también como Cayo César, gobernó el Imperio Romano entre los años 37 y 41 d.C.
- Nerón. Emperador del Imperio Romano entre los años 54 y 68 d.C.
- Genghis Kan. Guerrero mongol que unificó las tribus asiáticas y fundó el Primer Imperio Mongol de 1206 a 1227 d.C.
- Adolfo Hitler. Creó el III Reich Alemán y gobernó con su partido la Alemania de pre y durante la II Guerra Mundial.